El abogado de Puigdemont vaticina 12 años de cárcel para Junqueras
Según las previsiones de Jaume Alonso-Cuevillas, hombre de confianza de Puigdemont, la independencia catalana se consumará con Junqueras aún en prisión
Jaume Alonso-Cuevillas (2º izq), el abogado del expresidente de la Generalitat catalana Carles Puigdemont. EFE
El abogado de Carles Puigdemont y diputado en el Congreso de Junts per Catalunya (JxCat), Jaume Alonso-Cuevillas, cree que el Tribunal Supremo terminará dictando condenas de prisión por debajo de lo que pide la Fiscalía, concretamente la mitad. Su pronóstico es que el juicio del 1-O se saldará con penas de entre 8 y 12 años de cárcel para los imputados, siendo –según las acusaciones– Oriol Junqueras quien asumirá el principal castigo, por ser el número dos del Govern al momento de celebrar el referéndum ilegal.
Alonso-Cuevillas prevé que los magistrados del Supremo basarán sus condenas en los delitos de «conspiración para la rebelión», aunque también «hay quien dice que irá a la sedición o conspiración para la sedición». Al final, ese «es un debate técnico», añade, y asegura que «la sentencia está prácticamente hecha» y que «si quisieran, la podrían sacar la semana que viene», porque «se han reunido seis veces» y «están dedicados a eso». «La podrían hacer pública en agosto para cogernos medio de vacaciones, pero tienen miedo a la reacción», dijo.
Sobre dictar sentencia en el Supremo con los presos, el abogado del expresidente de la Generalitat de Cataluña afea que «es inhumano porque habrá otro traslado y es una forma de contener la reacción». «Si los tienes allí y la gente aquí (en Cataluña) se alarma más de la cuenta, se los pueden quedar allí. Ya volvemos a estar en la situación en la que los elementos políticos pesan más que los jurídicos», afirmó en una extensa entrevista con El Nacional en la que hace otras valoraciones.
El abogado de Puigdemont: «Cataluña será independiente en 5 u 8 años»
En línea con las declaraciones de Puigdemont el pasado jueves, en las que se mostraba pesimista con respecto al futuro del procés, Alonso-Cuevillas asegura que «Cataluña será independiente en cuestión de entre 5 u 8 años y que la solución vendrá impuesta por fuera». «Con España no pactaremos nunca, nunca, ni que mandara Pablo Iglesias, pero tendría que tener mayoría absoluta, que parece que no será un escenario viable en los próximos 20 años. Con España nunca tendremos una solución», añadió.
En ese sentido, ha cargado contra Pedro Sánchez porque, primero, era más fácil vender el relato separatista en Europa cuando el presidente del Gobierno era Mariano Rajoy, y segundo, porque su discurso «es más duro que el de la derecha porque es más desacomplejado».
«Tener a Sánchez en el gobierno nos perjudica más que nos facilita. Si tienes a Pablo Casado o a Albert Rivera, en Europa se visualiza que estamos en etapa franquista 2.0 y, en cambio, si tienes a Sánchez, que va con pátina de progresista, en Europa les cuesta más», dijo.
El regreso a Cataluña de Puigdemont
Hablando de Rajoy, Alonso-Cuevillas reveló que, después de las elecciones catalanas de diciembre de 2017, cuando todavía gobernaba el PP, Puigdemont contempló volver «en muchos momentos». «El 30 de enero se planteó seriamente venir, pero se abortó todo. Si hubiera venido, no lo habría sabido nadie. Había un plan para venir a ser investido y sabía que cuando saliera de allí se iba a Estremera. La prueba de eso es que los servicios secretos lo sabían», contó. «Él sabía que si hubiera sido investido, no habría durado nada. Pero estaba dispuesto».
Cerca de esas preguntas el letrado regaló al digital su titular, al asegurar que si Puigdemont tuviera que convertirse en un «preso político» por la causa independentista lo haría, pese a haber huido de España a finales de octubre de 2017. «Si en algún momento cree que por el bien de la causa es conveniente entregarse, o que lo entreguen o que lo detengan», lo hará, según Alonso-Cuevillas, que cuenta que conoció al ex president en el Palau de la Generalitat unas semanas antes del 1-O.
El ahora abogado de JxCat dice que espera estar en el Congreso «el mínimo posible» y se las da de independiente en la formación. «No haré nunca lo que yo no crea», aseguró. «Yo no estaba dispuesto a votar otra cosa que no fuera que no a la investidura de Pedro Sánchez. No estaba dispuesto y si al final se hubiera dicho que nos teníamos que abstener, yo habría dimitido. Eso me da mucha libertad», añadió
