Efectos colaterales del 21-D: menos cenas de empresa
El sector de la restauración hace un llamado a la "calma" y la "responsabilidad" ante las manifestaciones en Barcelona por el Consejo de Ministros
El sector de la restauración teme que, antes de terminar un año ya difícil, las concentraciones del 21-D enfríen las cenas de empresa usuales en los últimos fines de semana de diciembre. La posibilidad de terribles enfrentamientos en las calles con motivo del Consejo de Ministros en Barcelona tienen al sector en estado de alerta.
El sector del comercio y la hostelería ya llamaron a la «calma» y la «responsabilidad» el pasado 12 de diciembre, y expresaron su temor de que la imagen de Barcelona pierda más puntos si vuelve a subir la tensión en las calles «en unos momentos en los que el comercio se juega los resultados de todo el año».
Poco después, la Assemblea Nacional Catalana (ANC) anunció sus planes para colapsar Barcelona el 21 de diciembre y así contraprogramar el próximo Consejo de Ministros. Y el viernes se decidió que más de 9.000 agentes policiales blindarán Cataluña entre mossos, policías, guardias civiles y guardias urbanos.
Ante la evidente desatención que prestaron los grupos separatistas y las autoridades a las preocupaciones de los restauradores, el sector vuelve a avisar: corren peligro las cenas navideñas de empresa y las demás actividades usuales de la recta final del año, lo que pasaría factura a comerciantes ya desgastados por el «procés».
Los restauradores de Barcelona piden «calma» el 21-D
Los empresarios, sean grandes o pequeños, temen que los enfrentamientos en la calle el 21-D deriven en cancelaciones de comidas o cenas, siendo el 21 de diciembre el día más potente de la temporada, además del viernes 14, informó El Periódico.
El presidente del Gremi de Restauració de Barcelona, Roger Pallarols, alega que «no tendría sentido dar una imagen caricaturizada» de Barcelona, contraria al espíritu de una ciudad «donde todo el mundo ha sido siempre bienvenido». Los «anuncios de violencia hacen mucho daño al funcionamiento de la ciudad y su economía», añadió.
«Pedimos que todos rebajen el tono, la tensión y que vuelva la concordia y la positividad», dijo esta semana el presidente de Barcelona Oberta, Javier Cottet, y agregó que «los radicales ganan cuando hay conflicto». Cottet pidió «a todos los actores políticos que defiendan a los ciudadanos y la economía productiva».
Este fin de semana y el próximo serán clave para el cierre de año del sector, al no coincidir los viernes y sábados con las celebraciones de Navidad. Los restauradores cierran sus últimas ofertas y llenan los cupos aún disponibles al mismo tiempo que están atentos de cómo se va a comportar la ciudadanía ante el Consejo de Ministros.