Cuatro de cada diez contactos con un caso Covid escapa al test

La detección de asintomáticos para cortar la transmisión del coronavirus se ha convertido en una de las claves para tratar de frenar la curva ascendente que vive España de cara a la apertura de colegios el mes de septiembre, pero ni siquiera conocer que se ha tenido un contacto estrecho con un enfermo es suficiente para asegurar que se realizan suficientes test.

De acuerdo con las últimas conclusiones del estudio que está realizando el grupo de trabajo Data Science for COVID-19 de la Generalitat Valenciana, que dirige la ingeniera alicantina Nuria Oliver, y que analiza la evolución de la pandemia en España, un 40% de quienes han estado en contacto estrecho con alguna personas infectada por el nuevo coronavirus, no se habría realizado ningún test para verificar si también está contagiado.

En cuanto a los que sí han se han sometido a la prueba, entre las 2.422 respuestas recogidas en la primera semana de agosto, un 42% explicaba que había dado negativo; un 5% positivo y un 9% todavía estaría esperando resultados. 

Poca visibilidad sobre el trabajo de los rastreadores

«Lo que no sabemos ahora mismo es qué porcentaje de estas personas han sido contactadas por un rastreador, ni cuántos se han sometido a test de forma privada», según apunta Nuria Oliver en una entrevista en EFE.

En este sentido, la encuesta señala que el 80% de quienes admiten haber mantenido un contacto con un enfermo no han sido preguntados por sus propios contactos. El estudio espera profundizar en esta cuestión para próximas actualizaciones. 

«En este apartado vamos a modificar las posibles respuestas, porque la mayoritaria es ‘no, nadie me ha preguntado sobre mis contactos cercanos’, pero lo que realmente queremos saber es si se les ha contactado, no si se les ha preguntado por sus contactos cercanos, ya que quien responde no es el infectado, sino el contacto», explica Oliver.

Otro de los aspectos relevantes es que en todos los apartados las mujeres muestran una actitud más cauta que los hombres, tanto en el uso de las mascarillas (92% contra 84%), como en la desinfección de manos (93 % contra 86%).

Coronavirus y vuelta al cole

Sobre la vuelta al cole, el porcentaje de quienes temen su efecto no llega al 25%. Así, Nuria Oliver, subraya que «sólo el 21% de los encuestados cree que ir al colegio o al instituto es una actividad de bajo riesgo, un porcentaje que crece hasta el 26% entre quienes tienen hijos, pero que sigue siendo bajo».

En esta línea, respecto a la anterior oleada, aumenta la cifra de los que cree que es necesario tomar medidas más severas para atar los contagios, que crecen del 40% al 63%. En contraste quienes consideran que las medidas están siendo suficientes han caído del 40% al 14%.

No obstante, esto no indica que los encuestados apoyen un nuevo confinamiento. De hecho, el porcentaje de quienes lo defienden baja del 82 al 61% desde que finalizó el estado de alarma.