Cifuentes debe disipar estas dudas sobre el máster para salvar su cabeza
Cristina Cifuentes comparece ante la Asamblea de Madrid para tratar de disipar las dudas sin resolver sobre su máster. De ello puede depender su futuro político
La presidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes, acudirá este miércoles por la tarde a la Asamblea de Madrid para disipar dudas sobre el máster que cursó mientras era delegada del Gobierno, que según informaciones de Eldiario.es, aprobó sin presentar el trabajo final de máster (TFM).
Será la primera aparición pública de Cifuentes desde que saltó la polémica, hace dos semanas, y de lo convincente de sus explicaciones depende que mantenga el apoyo de Ciudadanos y salve la presidencia madrileña. La formación naranja ha flirteado en los últimos días con la idea de dejar caer al gobierno del PP en la región si su presidenta no consigue recuperar la credibilidad.
El primero de los puntos pendientes de aclarar es dónde se encuentra el TFM. La presidenta y líder del PP de Madrid argumentó que perdió el trabajo en una mudanza e instó a la propia Universidad Rey Juan Carlos a mostrar el documento. Por ahora la única prueba que ha presentado es un acta de presentación del trabajo, sin sello del registro de entrada.
Matriculada con las clases empezadas
Otra de las dudas que debe resolver Cifuentes es por qué se matriculó en el máster tres meses después del comienzo de las clases. Además, queda la incógnita de cómo presentó el trabajo 45 minutos después de que su tutor inaugurara un curso a 50 kilómetros de la facultad de Cifuentes.
Este mismo miércoles El Confidencial revela que el acta del TFM de Cifuentes tiene dos firmas falsificadas, la de la presidenta del tribunal y la de una vocal. Según el medio, no firmaron el documento que se realizó supuestamente el 21 de marzo, el día en el que salió publicada la noticia del máster de la presidenta madrileña.
Cifuentes debe explicar si fue a clase, ya que ningún alumno dice haber coincidido con ella
Por último, Cifuentes tratará de explicar si fue a clase, ya que el máster era presencial y ningún alumno de su promoción ha afirmado haber coincidido con la dirigente popular en el aula. Cifuentes era en aquel momento delegada del Gobierno en Madrid, una dedicación que dificulta la asistencia a 600 horas lectivas, impartidas todos los jueves, viernes y sábados durante un curso académico.
