Moncloa cambia sus ruedas de prensa por el malestar de los periodistas
La secretaría de Estado de Comunicación se abre a sugerencias de profesionales y asociaciones de periodistas tras las quejas
Moncloa ha ignorado durante las últimas horas el enfado de los periodistas por cómo se están llevando a cabo de las ruedas de prensa del Gobierno durante el estado de alarma por el coronavirus. En los últimos días han circulado quejas porquese eligen ‘a la carta’ las preguntas que responden los miembros del Ejecutivo y los expertos y técnicos que participan en la gestión de la pandemia. Incluso este miércoles, pese a que se enviaron interpelaciones al respecto, la Secretaría de Estado de Comunicación (SEC) las dejó por fuera de las comparecencias.
Tras el ruido de las últimas horas, la SEC ha enviado por la tarde un mensaje a su canal de Telegram en el que, pese a defender el modelo de elegir preguntas entre las que le llegan a diario vía Whatsapp, pide ayuda a los profesionales y a las asociaciones de periodistas para corregir las ruedas de prensa. Es decir, indirectamente el Gobierno ha admitido que la comunicación de estos días con los medios —y, por extensión, con la ciudadanía— es perfectible. Moncloa se ha mostrado ahora dispuesta a buscar un mejor mecanismo en este sentido, a partir de las recomendaciones que hagan los profesionales y las asociaciones.
La entidad que dirige el secretario de Estado, Miguel Ángel Oliver, ha sugerido a la prensa que se implante «un sistema de turnos y preguntas que haga posible la máxima participación» y que sea arbitrado por las propias asociaciones y profesionales. A su vez, les ha pedido que «decidan los medios que deben participar a diario en las convocatorias de prensa ofrecidas desde el Gobierno», y ha asegurado que «estamos abiertos a ello».
«La propuesta complementaria que planteen, en la seguridad de que representará la diversidad de medios existente en España, tanto editorial como de implantación y representación territorial, incluido el interés internacional, será atendida por esta Secretaría de Estado de Comunicación y puesta en marcha mañana mismo [el jueves 2 de abril], tan pronto como se compruebe su viabilidad técnica y que ésta no revista problemas operativos y de salud pública», concluye el comunicado.
La SEC se defiende
Los periodistas han denunciado que el sistema de las ruedas de prensa parece estar diseñado para «controlar» a los medios de comunicación, desde que las preguntas las formula el propio Oliver («un miembro del propio Gobierno») y que es la SEC la que filtra cuáles se formulan y cuáles no, hasta que se hace imposible «repreguntar en directo», pues las preguntas hay que enviarlas telemáticamente con antelación y los periodistas no pueden participar en el momento vía videoconferencia para insistir en sus interpelaciones ante la «reiterada» realidad de que los funcionarios la tienen muy fácil para eludir los cuestionamientos.
La Secretaría dirigida por Oliver ha defendido que su sistema de ruedas de prensa es «sencillo, eficiente y plural» y ha asegurado que desde que inició el estado de alarma «se han formulado casi 460 preguntas en 46 ruedas de prensa y los miembros del Gobierno han intervenido en 75 entrevistas en distintos medios de comunicación». Y añade: «Nunca ha habido una despliegue de transparencia informativa como el actual». Que las preguntas sean limitadas y los periodistas que puedan hacerlas un grupo reducido responde exclusivamente, según la SEC, a «razones de tiempo y de espacio».
