La salida del confinamiento: lenta, en varios tiempos y por regiones
A pesar de que el Gobierno prevé el fin del estado de alarma para el 10 de mayo, la desescalada comenzará en función de cada territorio
El Gobierno lleva avisando varias semanas de que la desescalada de las medidas de confinamiento será lenta y gradual, es decir, que a pesar de que el estado de alarma se haya prolongado hasta el 10 de mayo, nada garantiza que se retomará la actividad desde entonces. Sobre todo, después de que las cifras de contagios y fallecidos por coronavirus no remitan de sus niveles actuales.
A pesar de que el portavoz gubernamental en la crisis, el doctor Fernando Simón, asegurara este miércoles que la evolución de la epidemia reflejan una «estabilización» de la curva, el epidemiólogo dejó claro que aún se necesita tiempo para ir retomando progresivamente la vuelta a la actividad.
Los últimos datos del Ministerio de Sanidad registraron 4.211 nuevos contagios, hasta acumular más de 208.000 casos, y 435 nuevas muertes, que ya superan las 21.700 víctimas mortales.
Simón advirtió que no será hasta el próximo 10 de mayo cuando se inicien las medidas de desescalada. «Todo indica que la evolución es la correcta y que tenemos la capacidad necesaria para pensar en una transición», señaló este miércoles. No obstante, para poder comenzar esa etapa, España necesita cumplir con los seis requisitos que plantea la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Entre ellos, la posibilidad de preparar el sistema sanitario ante posibles brotes; algo que por el momento parece inviable debido al colapso en el que viven los hospitales españoles desde la llegada de la Covid-19 a mediados de febrero.
Avances y retrocesos en el plan
Según explicó el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, durante la desescalada se producirán «avances y retrocesos» al igual que ha ocurrido con la medida para permitir la salida de los menores de 14 años a la calle. Una restricción sobre la que el Ejecutivo rectificó en cuestión de horas.
La inmunidad que vaya adquiriendo la población española será uno de los factores clave en la salida del confinamiento. Un estudio del Instituto Carlos III desarrollado junto a las comunidades autónomas permitirá que se hagan 60.000 test PCR a 30.000 familias, lo que agilizará el estudio de la ciudadanía española y guiará ciertas medidas.
Este martes, Simón apuntó la posibilidad de que se fueran desescalando primero ciertas regiones. «Hay comunidades, provincias o islas en las que los riesgos de transmisión son nulos o cercanos», dijo.
«El confinamiento, aunque muy duro, es sencillo: hay que quedarse en casa. Cuando se empiece a permitir otras actividades, el ciudadano será el que tenga que asegurarse que cumple las medidas estipuladas y eso es más complicado», señaló el doctor un día después, apelando a la responsabilidad individual como vía para que el desconfinamiento sea plausible.