EEUU y Alemania luchan por derechos de la vacuna contra el coronavirus
Trump ha ofrecido elevadas donaciones a la empresa que produce la vacuna para obtener en exclusiva el resultado, enfrentándose a Alemania
La empresa CureVac, con sede en Tubinga, se encuentra investigando una vacuna contra el coronavirus con una elevada presión fruto de la gran cantidad de contagiados y fallecidos que se multiplican alrededor del mundo. Actualmente, a nivel global los afectados superan los 147.000 casos, mientras que las muertes ascienden a 3.199 en 140 países. Los test de la nueva vacuna podrían empezar a principios del verano, según la empresa que la investiga.
Esta situación está creando una disputa económico-política entre los dos países implicados. Donald Trump, presidente de Estados Unidos, está tratando de conseguirla por todos los medios. Intenta atraer a los científicos alemanes que están trabajando en la vacuna hasta EEUU mediante elevadas donaciones financieras para poder asegurse los derechos, según informa el periódico Die Welt.
De ese modo, la vacuna sería «únicamente para Estados Unidos», afirmó al diario una fuente próxima al gobierno alemán. Berlín, por otro lado, quiere asegurarse de que la vacuna se desarrolle también en Alemania y en Europa, y también le estaría proponiendo condiciones financieras interesantes a la empresa para que la investigación se quede en Alemania.
Fundada en 2000, CureVac se presenta como una empresa especializada en el «desarrollo de terapias contra el cáncer, terapias a base de anticuerpos, tratamiento de enfermedades raras y vacunas profilácticas». Se encuentra al oeste de Alemania y opera junto con el instituto Paul Ehrlich de vacunas y biomedicina para lograr el desarrollo de una posible vacuna contra el coronavirus.
Reunión en la Casa Blanca
Según un comunicado emitido por la empresa a principios de mes, un ejecutivo de la empresa fue invitado a la Casa Blanca “para discutir estrategias y oportunidades para el desarrollo rápido y la producción de una vacuna contra el coronavirus”. Trump y el vicepresidente, Mike Pence, y miembros de la comisión estadounidense de lucha contra el virus participaron en el encuentro, según la nota de CureVac.
“Tenemos mucha confianza en que podremos desarrollar una vacuna potente en los próximos meses”, indicó el entonces director de la empresa farmacéutica Daniel Menichella, que ha sido reemplazado hace una semana.
Desde el punto de vista de los funcionarios del gobierno, la disputa entre Alemania y EEUU se extiende más allá de la legalidad. «La venta de una empresa con un medicamento vital es una cuestión de seguridad nacional», indican.
Y añaden: «Los controles fronterizos deberían ayudar a combatir la inmigración ilegal y la trata de seres humanos y prevenir cualquier amenaza a la seguridad interna, el orden público, la salud pública y las relaciones internacionales de los Estados miembros». Otras compañías también están investigando una vacuna corona.