Cambiar de mascarilla cada 4 horas y otras novedades en los vuelos
No se obliga a dejar asientos vacíos ni a mantener distancias, aunque se recomienda dejar 1,5 metros de separación entre pasajeros cuando sea posible
La Agencia de Seguridad Aérea de la Unión Europea (EASA por sus siglas en inglés) junto al Centro Europeo para la Prevención y Control de Enfermedades (ECDC) han aprobado un nuevo protocolo que establece las normas para volar en avión a partir de ahora y hasta que se halle una vacuna. Según éste, los pasajeros deberán cambiar su mascarilla cada cuatro horas en los vuelos de larga duración.
Este elemento de protección, además, será siempre obligatorio para poder embarcar: desde que el viajero entra al aeropuerto hasta que sale del aeropuerto de destino, con la excepción de los controles de seguridad o aduanas.
Las mascarillas deberán ser traídas de casa por parte de los viajeros, aunque también se insta a las compañías a disponer de existencias de estos productos para solventar emergencias. El uso para los niños menores de seis años no es obligatorio, aunque los padres deberán estar pendientes de su comportamiento.
Con los recientes parámetros establecidos, las aerolíneas podrán reanudar los vuelos regulares después del parón causado por el coronavirus, que ha derivado en pérdidas millonarias en el mundo de la aviación. Las directrices que presenta el documento no varían demasiado de las líneas generales aprobadas por la Comisión Europea el pasado 13 de mayo.
Si bien la guía no exige que se dejen asientos vacíos, se recomienda mantener una distancia de 1,5 metros entre viajeros cuando esto sea posible. Se estipula también el reducir al mínimo los servicios a bordo (duty free y restauración); y a no permitir el ingreso al terminal del aeropuerto de ningún acompañante (salvo excepciones como personas con discapacidad o con movilidad reducida,), como publica este viernes El País.
Dependerá de las autoridades locales si se controla la temperatura
El informe también indica que no se ha dado (o no se conoce) ningún contagio en un vuelo. Esto —según la organización— se debe a la eficacia del sistema de filtrado HEPA que elimina el 95% de los virus. Para mantener la mayor seguridad se recomienda a las aerolíneas y aeropuertos que las labores de embarque y desembarque se hagan rápidamente y que el sistema de ventilación no esté parado más de 30 minutos.
A partir de ahora, antes de recibir la tarjeta de embarque se deberá declarar el estado relacionado con la Covid-19. Serán imprescindibles el extremar la higiene de manos y proporcionar información de contacto para permitir el rastreo si alguien del vuelo termina dando positivo por el virus.
Dependerá de las autoridades locales si se realizan controles de temperatura a los viajeros. En caso de decidirse afirmativamente, se realizarán antes del check-in y de la facturación del equipaje. En caso de tener una temperatura mayor a 38 grados no se podrá embarcar.
Por otra parte, el Ministerio de Consumo ha advertido de que tomará medidas contras las aerolíneas que se nieguen al reembolso de un billete de avión de un vuelo cancelado a causa de la pandemia del coronavirus.