Bélgica cierra bares y restaurantes con un 10% de los casos de España
El gobierno belga ordena el cierre de los bares, restaurantes y discotecas y la suspensión de la actividad docente, los actos deportivos y culturales
El Gobierno belga ha decretado el cierre de discotecas, bares y restaurantes y la suspensión de las actividades de ocio y deportivas para detener la propagación del coronavirus. Las drásticas medidas se aplicarán hasta el próximo 3 de abril en un intento de prevenir que la epidemia no llegue a los niveles registrados en Italia o España.
También se recoge la cancelación de la actividad docente aunque no el cierre de las escuelas. Los supermercados y las farmacias, por su parte, sí permanecerán abiertos durante toda la semana; el resto, solo lo harán de lunes de a viernes.
La situación del Ejecutivo de Sophie Wilmès, en funciones desde hace unos meses dentro del enrevesado escenario político belga, se enfrenta a una crisis sanitaria que ha dejado alrededor de 400 contagios en el país y 3 víctimas mortales.
Unas cifras menores en comparación con las de Italia, que esta semana anunció el «bloqueo total» del país después de no poder contener al coronavirus, que acumula más de 15.000 contagios y 1.016 muertes. Los datos belgas suponen también alrededor de un 10% de los casos de España, que suma más de 3.000 y 87 fallecidos
«Queríamos evitar situaciones como la de Italia», dijo la primera ministra al anunciar la batería de restricciones en la noche de este jueves.
La interrupción de la actividad escolar podría quedar suspendida hasta el 20 de abril, ya que dos semanas antes comienzan las vacaciones de Semana Santa en el país.
El Gobierno belga mantendrá un servicio de acogida para niños con familias que no tengan la opción de cuidarlos en un intento por reducir el contagio con sus abuelos, declarados el mayor grupo de riesgo. Las guarderías también permanecerán abiertas.
China, el ejemplo a seguir
Las declaraciones de Wilmès reflejan la imagen de la gestión de la crisis sanitaria en Italia. El Ejecutivo de Giuseppe Conte se ha visto obligado a decretar el aislamiento total del país ante el incremento de la epidemia. Es, tras China, la región más castigada tanto en contagios como en víctimas mortales.
Precisamente, la Organización Mundial de la Salud (OMS) puso de ejemplo a principios de mes al gigante asiático en su gestión de la lucha contra el coronavirus.
«La unánime conclusión del equipo [de la OMS] es que China ha cambiado el curso del brote dentro del país. Lo que era un rápido crecimiento se estabilizó y ha comenzado a bajar más rápido de lo que uno puede esperar si hubiéramos observado las dinámicas naturales en este tipo de casos», señaló Bruce Aylward, jefe de la misión de expertos del organismo en el epicentro de la epidemia.
Bélgica, con 11,4 millones de habitantes, ha comenzado a aplicar severas restricciones para evitar tener que llegar al escenario de incertidumbre que viven los ciudadanos italianos o españoles desde hace unas semanas.