La concertada toma las calles de España para clamar contra la Ley Celaá
Una caravana de vehículos se concentra en el centro de Madrid para protestar contra la reforma educativa del Gobierno de Pedro Sánchez
Las familias de la educación concertada han salido a las calles de las principales ciudades españolas para clamar contra la nueva ley educativa que ha impuesto la ministra Isabel Celaá. Bajo la consigna “Por el derecho a elegir la educación que queremos”, han mostrado su rechazo a una normativa que atenta contra sus posibilidades de escoger dónde escolarizar a sus hijos.
Madrid se ha convertido en el epicentro de las protestas con una gran caravana de vehículos que ha recorrido el Paseo de la Castellana desde las once de la mañana entre el ruido ensordecedor de los cláxones. Los coches han formado una larga serpiente en la que han ondeado banderas y globos naranjas, que se ha convertido en el símbolo de la protesta.
Los padres de la concertada han respondido a la llamada de la Plataforma Más Plurales que ha convocado las manifestaciones en 30ciudades españolas para exigir al Gobierno de Pedro Sánchez que dé marcha atrás en su plan de reformar la educación. Familias de todas las comunidades autónomas han salido con sus coches a protestar contra la nueva normativa, a excepción de Cataluña, País Vasco, Canarias o la Comunidad Valenciana, donde no se prevén manifestaciones.
«Estamos ante un Proyecto de Ley fuertemente intervencionista que promueve la restricción de derechos y libertades ciudadanas y atenta contra la pluralidad de nuestro sistema educativo, elemento sin duda clave en una sociedad democrática», han justificado fuentes de la organización.
La oposición secunda la protesta
Los principales partidos de la oposición han mostrado su respaldo a esta manifestación en el centro de Madrid. Partido Popular, Ciudadanos y Vox han acompañado a los manifestantes, después de no haber logrado sumar los apoyos suficientes para tumbar el proyecto de ley en el Congreso de los Diputados, que ya se convirtió en el escenario del preludio de las protestas con gritos de «¡libertad!».
Los tres partidos del bloque de la derecha han hecho frente común contra la ministra Celaá y se han comprometido a anular la reforma educativa si logran desplazar de la presidencia del Gobierno a Pedro Sánchez.
“Esta ley durará lo que tardemos en llegar al Gobierno”, ha defendido el líder del Partido Popular, Pablo Casado, que ha circulado en un vehículo acompañado de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso.
Casado ha enfatizado que su formación está a favor de la “libertad de elección de las familias” y del establecimiento del castellano como la “lengua vehicular” en todo el país. Dos de los principales focos de la polémica en el texto que ha elaborado el Gobierno.
También ha respondido a la protesta los líderes de Vox. El portavoz parlamentario de la formación, Iván Espinosa de los Monteros, ha advertido que batallarán en los tribunales para tratar de tumbar la ley educativa de Celaá. “Vox recurrirá esta ley en todos sus aspectos ante el Tribunal Constitucional y la revertirá”, ha expuesto.
Ciudadanos también ha sumado fuerzas en la manifestación en coche que ha recorrido la capital española. La vicealcaldesa de la ciudad, Begoña Villacís, ha denunciado que “no puede anularse el derecho a decidir” y ha tratado de alejar el debate del binomio educación pública contra educación concertada.