Catalunya en comú confirma su participación diluida en el referéndum
Catalunya en comú participará del referéndum pero no hará campaña ni lo considerará como una consulta vinculante
La dirección de Catalunya en comú confirmó, en un encuentro realizado en Terrassa, lo que ya se anticipaba como seguro: participarán en el referéndum pero de una forma diluida, sólo a modo de movilización ciudadana, y sin otorgarle un carácter vinculante a la consulta. Ni siquiera harán campaña por ir a las urnas. Esta era la postura que propugnaba la alcaldesa de Barcelona Ada Colau y el coordinador general Xavier Domènech. En tanto, en la franquicia catalana de Podemos, Albano Dante Fachín había proclamado su apoyo a la consulta independentista, lo cual fue desautorizado por Pablo Iglesias.
Domènech dijo que la decisión del partido, apoyada con el 75% de los votos de los dirigentes, responde “a la pluralidad de un espacio político que no se posiciona ni con el sí ni con el no”, porque considera que el referéndum “no resolverá el conflicto entre España y Cataluña”.
Aniversario con turbulencias en el Pdecat
Antes de la decisión de Terrassa el Pdecat realizó un acto por el primer aniversario del partido con pedidos a Catalunya en comú de que apoyen la consulta del 1-O, aunque más bien parecían reproches por una decisión que ya se conocía de antemano. “Van vestidos de antisistema pero, cuando les pides ayuda por sistema están al lado de Felipe González, de Aznar y de Zapatero«, dijo Carles Puigdemont.
Es el mismo tono al que recurrió Marta Pascal, coordinadora general del partido, quien se dirigió a los principales dirigentes de la agrupación morada: “Señor Iglesias, señora Colau, ¿de qué lado están ustedes? ¿Del lado del PP que no deja poner las urnas, o de la de los demócratas de verdad?”.
Puigdemont, que ha clausurado el Consell Nacional, ha alertado de posibles represalias por parte del Estado si el proceso soberanista no culmina con la independencia, unas acciones que, ha vaticinado, «no harán distinción entre votantes del ‘sí’ y votantes del ‘no». Más concretamente, dijo que habrá un expolio fiscal a Cataluña, un abandono de las infraestructuras “y un menosprecio a la lengua y la cultura”.
Además del desacuerdo con los comuns, esta semana el Pdecat ha entrado en crisis por la fulminante destitución del consejero de Empresa Jordi Baiget, y el cortocircuito con la presidente de la Diputació de Barcelona, Mercè Conesa, quien dijo que la hoja de ruta independentista podría conducir a “un callejón sin salida”.