Cargos de la Generalitat sin empleo desfilan por la sede del Pdecat
La aplicación del artículo 155 ha enviado al paro a muchos de los colaboradores de los exconsejeros de la Generalitat
¿Qué pasa cuando meten en la cárcel a tu jefe? Pues te puedes quedar sin trabajo. Esto es lo que ha sucedido a decenas de altos cargos y asesores de los consejeros de la Generalitat. Ellos están en situación de cárcel preventiva o en el exilio de Bruselas y, muchos de sus colaboradores, en el paro.
El Gobierno de Mariano Rajoy ha destituido a Carles Puigdemont, Oriol Junqueras y a todos sus consejeros. También a algunos secretarios generales, directores y cargos de confianza, entre los que incluso se encuentran secretarias personales. En total, han cesado a 314 cargos, aunque algunos de la lista seguían este viernes en sus puestos.
Por la sede central del Pdecat de la calle Provença de Barcelona desfilaron este viernes algunos cargos que se acaban de quedar sin trabajo, según confirman fuentes de esta formación. Se presentaron en el partido tan sólo unas horas después de que sus jefes ingresaran en la cárcel por orden de la jueza Carmen Lamela. Preguntaron por las posibilidades de encontrar otro trabajo. Sin embargo, el partido de Artur Mas hace mucho tiempo que dejó de ser una oficina de colocación.
El exconsejero Baiget se recolocó
Fuentes internas indican que hace unas semanas se repescó a Jordi Baiget, cesado en junio pasado como consejero de Empresa por dudar del referéndum. Baiget ocupa ahora un despacho en la planta de mando del Pdecat junto a los de Mas, Neus Munté y Marta Pascal. No sólo se libró de ir a la cárcel, sino que ha vuelto al antiguo puesto que tenía en el partido. Baiget es una excepción. Los cesados por el Gobierno de Rajoy al amparo del artículo 155 no tendrán la misma suerte. La mayoría deberá buscarse la vida, lejos del partido y quizás también de la administración.
Por ejemplo, entre los que buscan una recolocación se encuentra la fiel colaboradora de un consejero al que ha seguido durante años por diversos destinos. Mientras su jefe esté en la cárcel, no sabe a qué atenerse. “Es un drama para muchas personas”, asegura una fuente del partido en referencia a las personas que han dejado colgadas.
Artículo 155: los consejeros están en la cárcel y muchos de sus colaboradores en el paro
Desde octubre del año pasado, el Pdecat ha prescindido de 31 empleados. En estos momentos, la plantilla la forman 54 personas, pero la dirección planea quedarse sólo con 25. Les sobran 29, pero no les echan porque no hay dinero para indemnizaciones, según apuntan fuentes internas.
La dirección del Pdecat ha previsto vender la actual sede de la calle Provenza, propiedad de la vieja Convergència (CDC), a la que se mudaron en el verano de 2016. El consejo nacional del partido ya ha dado el visto bueno. Están pendientes de la inminente sentencia del caso Palau, que les puede acarrear el pago de una indemnización millonaria porque CDC aparece como responsable civil. El partido encargó un estudio para vender patrimonio con el que hacer frente a las posibles condenadas y a la reestructuración interna.