Buch se enfrenta a Torra por la purga en los Mossos
El consejero Buch descarta ceses en la cúpula de los Mossos d’Esquadra tal como exige el presidente Torra
El consejero de Interior de la Generalitat, Miquel Buch, aguanta el pulso que le ha echado su presidente, Quim Torra, para que haga una purga en los Mossos d’Esquadra. El consejero descarta ceses en la cúpula del cuerpo por la actuación judicial durante los disturbios de Barcelona.
Durante la sesión de control parlamentario de este miércoles, se visualizó el enfrentamiento de Buch con Torra e, incluso, con Junts per Catalunya, su propio partido.
Torra se abonó a las tesis de la CUP. Después de que el diputado anticapitalista Vidal Aragonès recordara los más de 600 heridos, 194 detenidos, “atropellos en carrusel”, “bolas de goma revestidas de plástico”, porrazos en la cabeza, uso de gas lacrimógeno, … Torra le dio “la razón”. El presidente añadió que, por estos hechos, decidió crear una comisión parlamentaria de investigación para estudiar “con total transparencia” la actuación policial.
Incluso Eduard Pujol, portavoz de JxCat, afirmó que las imágenes que se han visto de la actuación de los Mossos chocan con “una policía moderna, medida, que huye de los excesos”.
De nada sirvió que Buch recordase que, en los últimos diez años, se han sancionado 514 agentes por mala praxis. Insistió en que el cuerpo depura responsabilidades cuando un agente no se ajusta al protocolo.
Fuentes próximas al equipo de Buch indican que intenta ganar tiempo. Apuntan que aguantará como mínimos hasta después de las elecciones del 10-N y que no se plantean ceses en la cúpula de los Mossos. Si se abren expedientes, será solo para agentes si se comprueba que se extralimitaron.
Represalias en Interior
Estas fuentes lamenten que Torra se comporte con los Mossos como un “activista” y no como “presidente” de la Generalitat. Recuerdan que ya se produjo un cese, el de la jefa de prensa de la Consejería de Interior, Joana Vallès, porque transcendió que los agentes podían utilizar gas pimienta para reprimir manifestantes violentos durante las protestas por la sentencia del procés. Pero el cese se produjo el 23 de septiembre, tres semanas antes de que el Tribunal Supremo difundiera las condenas y empezaran las movilizaciones.
Aunque la decisión del cese de la periodista se atribuyó a Buch, con la excusa de un “error de comunicación”, detrás estaba Torra y su entorno.
La vigilia del segundo aniversario del referéndum del 1 de octubre dimitió Andreu Martínez como director de Policía. Ahora ejerce de director de estrategia de la Corporación Catalana de Medios Audiovisuales (CCMA), el gobierno de TV3 y Catalunya Ràdio. En Interior se comenta que es “el más listo de la clase” porque se largó antes de que empezará “el follón”.
Buch no quiere más cambios en su equipo político ni en el organigrama de mandos uniformados. Aguanta la presión de su gobierno y de su partido. Después de la refriega parlamentaria, Torra y Buch hablaron en privado durante el viaje que realizaron este miércoles a las comarcas de Tarragona que se vieron afectadas por inundaciones.
Piden medallas para los mossos
Los sindicatos policiales también cargan contra el consejero Buch, si bien estos le exigen que reconozca públicamente la labor que han realizado los agentes durante la semana de disturbios en Barcelona y otras ciudades catalanas.
En una carta enviada al consejero de Interior, el sindicato Uspac le pide que condecore a todos los mossos heridos (154 hasta el domingo pasado) y a los que detuvieron a manifestantes violentos. También reclama que se aplique a los agentes de las unidades que participaron en los operativos una retribución en concepto de “riesgo”.
Uspac ruega al consejero Buch que diga al presidente Torra que no tienen competencias para ordenar una investigación contra agentes de los Mossos. Según el artículo 23 del decreto 183/1995, sobre el régimen disciplinario del cuerpo, la incoación de expedientes disciplinarios corresponde al director general de Seguridad Ciudadana.
