Bruselas indica a Montoro los próximos impuestos a subir
La Comisión Europea reprocha a España la baja recaudación en impuestos verdes y la carencia de una política coherente
La Comisión Europea (CE) suspende a España en política medioambiental. Desde Bruselas han instado al Ejecutivo español a revisar la fiscalidad en asuntos referidos al agua, residuos y calidad del aire. A día de hoy, el país debe recaudar más y hacerlo de manera coherente. Prueba de ello es que el Estado «subvenciona los combustibles fósiles», tal y como señala el informe.
Según el documento, los impuestos medioambientales han generado los ingresos más bajos de todos los países de la Unión Europea (UE) durante la última década. En concreto, las tasas representaron el 1,85% del producto interior bruto (PIB) en 2014, frente a la media de la UE del 2,46%.
El problema principal está referido a la política impositiva del agua. Bruselas considera que las tasas «son muy elevadas» y propone como alternativa un sistema distinto de tarifas así como la reutilización de las aguas residuales. La calidad del aire también trae de cabeza a la CE.
La situación sigue siendo «preocupante» al superar habitualmente los límites de dióxido de nitrógeno (NO2), como en el caso de Madrid. Por último, La gestión de residuos también muestra síntomas de alarma, ya que más de la mitad se vierten en vertederos municipales, mientras que la media europea está por debajo del 30%.
Esfuerzos insuficientes
A pesar de todo, Bruselas reconoce que se han tomado medidas en sectores como la energía –con los gases de efecto invernadero como paradigma– o el impuesto sobre la extracción de gas y petróleo. No obstante, estos esfuerzos deben aumentarse si se quiere cumplir con los objetivos dictados para el 2020, concluye el gobierno comunitario.