Bildu aviva la guerra entre Calviño e Iglesias por la reforma laboral
El vicepresidente se apoya en Yolanda Díaz para eliminar de manera integral la reforma laboral, mientras Economía no cede
El apoyo de Bildu a los Presupuestos Generales del Estado (PGE) aviva la ‘guerra’ entre la ministra de Economía, Nadia Calviño, y el vicepresidente segundo, Pablo Iglesias. El líder de Podemos se apoya estos días en la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, para presionar en la mesa de diálogo social y acordar su derogación íntegra. Algo a lo que se oponen desde Economía, que busca eliminar sólo los aspectos más lesivos.
El ‘sí’ de Bildu viene acompañado de distintas premisas, entre ellas, la derogación íntegra de la reforma laboral, como así pactaron con la portavoz socialista Adriana Lastra. Más tarde y a petición de Calviño, ese texto fue modificado por el Gobierno para recalcar que se trata de eliminar los aspectos más lesivos.
Una rectificación que no aceptó Bildu asegurando que lo pactado fue el primer documento donde se podía leer la derogación de la norma “de manera íntegra”.
Iglesias se ha comprometido con la formación abertzale para obtener el apoyo de sus socios a las cuentas públicas. Y, para ello, el vicepresidente se apoya en la ministra Yolanda Díaz quien negocia también con patronal y sindicatos en la mesa de diálogo social.
“Seguimos trabajando para derogarla lo antes posible. De esta manera se cumplirá la hoja de ruta pactada con el PSOE”, aseguran fuentes de Podemos a Economía Digital.
Calviño no cede ante Iglesias
“Pensaba que este tema ya estaba solucionado”, responden en el Ministerio de Economía con sorpresa. “La posición de la ministra Calviño no ha cambiado sobre este asunto”, responden al respecto.
Economía busca derogar los aspectos más lesivos de la reforma laboral, apremiando en la elaboración de un nuevo Estatuto de los Trabajadores. Calviño ve “absurdo” y “contraproducente” derogar la norma por completo.
Pero Podemos reabrió la batalla este jueves en el Congreso con motivo del apoyo de Bildu a los Presupuestos. Su portavoz Pablo Echenique habla de “desmontaje absoluto” de la reforma laboral, mientras que el presidente de la CEOE, Antonio Garamendi, asegura que “no es el momento” de abordar ese debate.
El líder de la patronal se mostró, sin embargo, dispuesto a abordar el debate sobre la reforma laboral: “Nos sentaremos y hablaremos”. Pero ahora, dijo Garamendi, “de lo que hay que hablar es de cómo podemos salir a la calle y abrazarnos”.
El FMI ensalza la reforma laboral de Rajoy
El Fondo Monterario Internacional también advirtió este viernes al Gobierno que estudie con cuidado la reforma a aplicar destacando la utilidad y los buenos resultados que han permitido alcanzar la modificación que llevó a cabo el Ejecutivo de Mariano Rajoy.
«La reforma ha ayudado a mejorar la situación en el mercado laboral», ha señalado este viernes Andrea Schaechter, responsable de la misión del Fondo en España.
La responsable recalca que cualquier modificación deberá ser «estudiada con cuidado», en alusión a la intención del Gobierno de eliminar los «aspectos más lesivos» de esa legislación.
En este sentido, el Fondo propone algunas actuaciones como la introducción de un contrato único y la denominada mochila austriada ya que, en su opinión, «tiene el potencial de reducir significativamente la segmentación del mercado laboral en España, sin aumentar el coste del despido para las empresas ni reducir la protección del empleo para los trabajadores».
Malestar en Moncloa
Si el pacto con Bildu y su premisa no fueran suficiente, ahora un documento elaborado por Economía apuesta por la prevalencia de los convenios de empresa sobre los sectoriales. Es decir, dar menos poder en la negociación colectiva a los sindicatos respecto a este asunto.
La propuesta que, tal y como avanzó El País, diluye el pacto de coalición, causando malestar entre Economía y Trabajo, además de en los sindicatos. Además, se abre a la posibilidad de flexibilizar las limitaciones al ámbito temporal del convenio colectivo, haciéndolo llegar más allá de su vigencia y hasta la negociación de uno nuevo.
Economía aboga también por impulsar las políticas activas y por simplificar el menú de contratos. Algo que “no va en la línea de la negociación colectiva pactada en el acuerdo de coalición”, explican desde Trabajo.
Este rifi-rafe no sería el primero, entre Economía y Trabajo, ya ha habido grandes diferencias con los expedientes de regulación temporal de empleo; con la ley de teletrabajo; con la normativa que regula los riders y con el subsidio extraordinario para los 250.000 parados que perdieron sus ayudas en el estado de alarma.
Desde Trabajo intentan ‘quitar hierro’ al asunto y “como siempre” esperan “llegar a un acuerdo” que contente a ambas partes. Aunque las mismas fuentes recalcan que la dinámica de trabajo sigue dividida entre la ortodoxia de Calviño y la ministra de Hacienda, María Jesús Montero frente al activismo por parte de los ministros de Podemos y el del ministro de Seguridad Social, José Luis Escrivá.