AstraZeneca y Oxford prevén empezar a vacunar en enero con 3 billones de dosis
El investigador Josep Baselga espera un verano de cierta normalidad pese a un invierno duro y avances en la vacunación a partir del primer trimestre de 2021
AstraZeneca prevé que si los últimos ensayos clínicos de las vacunas arrojan buenos resultados se podrá, a finales de noviembre o a principios de diciembre, disponer del fármaco para la inmunidad. La farmacéutica, que desarrolla este proyecto de la mano de la Universidad de Oxford, prevé 3 billones de vacunas para enero y que en el primer trimestre de 2021 la vacunación ya esté avanzada.
Así lo ha defendido el director mundial de I+D del área de oncología de la farmacéutica británica AstraZeneca, el doctor Josep Baselga, en una entrevista en El Món a RAC1. «A principios de año tendremos 3 billones (3.000 millones) de dosis de AstraZeneca y supongo que el resto tendrán cifras similares. No podemos esperar seis meses, la tragedia sería tenerla y tener que comenzarla a producir».
El investigador del laboratorio farmacéutico ha asegurado que la vacuna no será para Estados Unidos o para Europa, sino que tiene una vocación global y que se venderán a precio de coste, que está fijado en dos euros: «Si los estudios son positivos, tendremos las dosis en enero, lo que no sabemos es cuáles serán los canales de distribuciones».
La vacuna de AstraZeneca: dos dosis con 28 días de diferencia
Baselga ha explicado que la vacuna de AstraZeneca no será la única, sino que habrá más laboratorios preparados para desarrollarlas. «En este momento estamos desarrollando en el mundo 175 vacunas (Johnson & Johnson, Moderna, etc), de las que 35 están en ensayos clínicos con pacientes y 10 de ellas en fases finales».
¿Cómo funcionará la vacuna de AstraZeneca? El investigador de la farmacéutica ha explicado que a través de la inoculación del material genético del virus, para que el sistema inmunológico se ponga a funcionar y generar anticuerpos contra la enfermedad.
La vacuna de esta farmacéutica, a diferencia de otras como la de Johnson & Johnson, prevé una vacunación en dos veces: un primer pinchazo con una dosis inicial que por sí misma ya genera inmunidad –aunque no inmediatamente– y un segundo pinchazo a los 28 días que ayude a modo de recordatorio a afianzar esa generación de inmunidad.
El investigador también se ha referido a la eficacia de la vacuna, que ha fijado en un 70% de efectividad en función de los parámetros establecidos por la Unión Europea y los Estados Unidos como límite para que un fármaco de estas características pueda ser válido: «Si una vacuna no da el 70%, sino que da el 85, pues mejor que mejor».
Desarrollo de «anticuerpos monoclonales»
Pese a ello, esta no es la única fórmula para protegerse del virus. Balsega ha explicado al citado medio que también se están desarrolllando los «anticuerpos monoclonales». El laboratorio, a través de un complejo proceso de ingeniería molecular, ha creado unos anticuerpos, «los mejores», que permiten combatir el virus y son ideales para personas inmunodeprimidas, como enfermos de cáncer, que es lo que se inyectó Donald Trump para curarse de la Covid-19.
Preguntado sobre la reinfección de pacientes, ha asegurado que la inmunidad curado «no son seis meses», y aunque se desconoce si es de un año o de dos años se podría perder, el investigador de AstraZeneca ha reconocido que apunta a ser duradera, sobre todo cuando los casos de reinfección son tan esporádicos y se tienen que poner en cuestión.
Baselga también ha augurado que, pese a que todavía no se puede hablar de normalidad completa, augura un «invierno duro» pero un verano de relativa tranquilidad. Pese a ello, ha reconocido que las mascarillas y la distancia social con higiene de manos ha venido para quedarse una larga temporada.
Vacuna de Oxford: historia de un retraso
El optimismo de AstraZeneca contrasta con la prudencia de varios gobiernos. El secretario de salud del Reino Unido, Matt Hancock, indicó que esperaba que no estuviera disponible hasta 2021. Cuando fue preguntado en una entrevista en la BBC en si algunas personas podrían recibir una vacuna este año, Hancock respondió: “No lo descarto pero esa no es mi expectativa central».
El enfriamiento del optimismo también vino de los propios desarrolladores de la vacuna. Kate Bingham, presidenta del grupo de trabajo del Reino Unido, indicó hace unas semanas que aunque espera que los ensayos clínicos muestren signos de éxito de cara a finales de año, no podía dar garantías.
«Creo que existe una pequeña probabilidad de que podamos tener la vacuna Oxford antes de Navidad», explicó la experta, siempre con tono optimista, pero insistió en que todavía persisten muchas incertidumbres sobre cuánta protección brindan y por cuánto tiempo, lo que se necesitarán más candidatos. “Todavía no hemos terminado”, aseveró.