Dos alcaldes habilitan rastreadores ante la inacción de la Generalitat
Los ayuntamientos leridanos de Aitona y Alcarràs hacen seguimientos a los positivos por Covid-19 por la ineficacia de la Generalitat
Ante la falta de rastreadores de la Generalitat, dos ayuntamientos de la comarca catalana del Segrià han habilitado personal municipal para que se encargue del seguimiento de positivos de Covid-19.
Se trata de los ayuntamientos de Aitona, de solo 2.600 habitantes, y Alcarràs, de cerca de 10.000, que han optado por hacer un seguimiento de positivos y contagiados ante la inacción del gobierno catalán.
En Aitona, la alcaldesa Rosa Pujol ha habilitado a tres empleados municipales para que apoyen al consultorio local. Entre sus funciones están las de rastrear la cadena de contactos de los que dan positivo en las pruebas de PCR.
En Alcarràs, el ayuntamiento de Manel Ezquerra destinó una decena de empleados a supervisar el confinamiento de los contagiados.
En esta última localidad, limítrofe con Lleida, se han registrado 58 positivos asintomáticos en la residencia de ancianos que hasta ahora se había visto libre de covid-19.
El alcalde de Lleida, Miquel Pueyo, advierte que esta semana será “clave” en la evolución de los brotes registrados en esta ciudad y su comarca. El número de nuevos positivos se estabiliza, pero las hospitalizaciones siguen en aumento. En martes se registraron 164, 12 más que el día anterior.
Derivación de pacientes a Barcelona
Si es necesario, el principal hospital leridano, el Arnau de Vilanova, derivará pacientes ingresados por otras dolencias que no sean covid-19 al Hospital Vall Hebron de Barcelona. La Generalitat decretó medidas de confinamiento para Lleida y parte de su comarca, unas de las áreas más afectadas por los rebrotes.
Sobre la falta de rastreadores, la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, ofreció la pasada semana entre 40 y 50 rastreadores para seguir los contactos de positivos, pero la consejería de Salud de Alba Vergés declinó aceptarlos. Según las palabras de Colau, la Generalitat le respondió que “no lo ve necesario”.
Este miércoles en el parlamento catalán, Jorge Soler, diputado leridano de Ciudadanos, pidió la dimisión de la consejera Vergés por su «incapacidad» para contener la propagación de los brotes. Afirmó que “ha perdido el control”. Le recordó que el fracaso de los rastreos.