Albert Batlle será el nuevo director de los Mossos d’Esquadra tras fracasar en Antifraude
El ex alto cargo socialista ejercía sólo nominalmente como número dos de la oficina catalana contra la corrupción
Los Mossos d’Esquadra ya tienen un nuevo jefe político. La Generalitat ha hecho oficial el nombramiento de Albert Batlle como director de los Mossos d’Esquadra. El ex alto cargo socialista ejercía actualmente como número dos de la Oficina Antifraude de Catalunya. Allí llegó como hombre próximo al PSC, aunque en la práctica en su entorno profesional se le considera un político más ligado hoy al consejero de Justícia, Germà Gordó.
Batlle sustituye al convergente Manel Prat, que renunció al cargo por motivos personales, según aseguró de manera confusa. Su figura profesional se había visto muy deteriorada por el caso Ester Quintana, así como por otras polémicas actuaciones de los agentes antidisturbios. Prat había prometido que, si se demostraba que la policía autonómica había sido la causante de la pérdida de un ojo de esta ciudadana, que al parecer no se encontraba en zonas de cargas, dimitiría. El juez instructor por ahora mantiene imputados a varios mossos y confirma que se dispararon bolas de goma.
Cargo difícil de cubrir
El Govern pidió la semana pasada tiempo para encontrar al sustituto de Prat. La silla de director de los Mossos quema y el Ejecutivo no consensuaba un nombre. Entre los aspirantes, sonó la figura del delegado del Govern en Tarragona, Joaquim Nin, hombre fuerte de CDC.
El nuevo director de los Mossos d’Esquadra ejercía nominalmente como número dos de la OAC desde hace tres años (su cargo era el de director adjunto). Sin embargo, las desavenencias con el director del órgano anticorrupción le habían supuesto la virtual marginación. Mantenía formalmente el cargo y las condiciones laborales y económicas, pero no disponía de ninguna capacidad ejecutiva tras perder la confianza de Daniel de Alfonso. Antes, durante las dos legislaturas del Gobierno tripartito, había sido responsable de las prisiones catalanas. Batllé se inició en política como concejal en la capital catalana en el año 83.
Panorama en la policía
La dimisión de Prat no ha mejorado la imagen de los Mossos. Batlle asume el mando con un escenario que se ha complicado mucho en los últimos días. La policía catalana está en el ojo del huracán por su actuación en el desalojo de la casa okupa Can Vies (Barcelona) y los días posteriores de disturbios en las calles. El dispositivo policial así como unas identificaciones masivas poco ortodoxas han levantado las críticas de los partidos de la oposición.