Revolución en las herencias: el fenómeno de los testamentos solidarios se expande a más de 25 países

Hacer el testamento es de vital importancia a la hora de legar los bienes en herencia y evitar conflictos entre los herederos. Si bien lo más habitual y tradicional es dejar el patrimonio a los descendientes u otros familiares, cada vez es más frecuente la figura del testamento solidario.

Se trata de una colaboración altruista en la que las personas incluyen en su testamento una donación a una organización no lucrativa, ya sea dejando una parte del patrimonio (herencia) o un bien concreto (legado). Una acción solidaria que permite que estos ingresos que reciben las ONG se destinen íntegramente a causas benéficas.

Por ejemplo, para avanzar en investigación médica, acompañando a personas mayores, defendiendo los Derechos Humanos, promoviendo la educación, protegiendo a la infancia o cuidando del planeta y del medio ambiente.

Testamento solidario en más de 25 países

Recientemente, se ha conmemorado el Día Internacional del Testamento Solidario, el pasado 13 de setiembre. En 2011, diversas plataformas internacionales se unieron para sensibilizar sobre la importancia de este tipo de colaboración, y los resultados, más de una década después, son evidentes.

Más de 25 países, desde la zona euro hasta Canadá, Australia, Corea del Sur o Japón, han reportado un crecimiento de los testamentos solidarios. En Inglaterra, se ha pasado de un 13% de los ciudadanos que habían hecho este tipo de documento en 2013, a un 21% en 2023. También en los Países Bajos se ha incrementado la cifra del 4% en 2017 al 7% en 2023.

En cuanto a España, la plataforma HazTestamentoSolidario.org explica que las 24 organizaciones que la componen han visto como en los últimos años ha aumentado tanto el número de personas interesadas en recibir información sobre esta cuestión –582 en 2023, un 31% más que en 2022– como la cantidad de fondos recaudados –54 millones de euros en 2023, un 33% más que en el año anterior.

Quién puede hacer un testamento solidario

El proceso para hacer un testamento solidario es sencillo, reversible y económico, y lo puede hacer cualquier persona. Además, no es necesario tener un gran patrimonio, recalcan desde HazTestamentoSolidario.org, que califican este acto de «generosidad» que «envía un mensaje de solidaridad a generaciones futuras y permite que, muchas veces, proyectos y acciones que no se pueden financiar de otra forma, se puedan llevar a cabo».

Por otro lado, desde la plataforma subrayan que hacer este tipo de legados no perjudica al resto de los herederos, pues hay una parte de la herencia que es de «libre disposición», es decir, de la que el testador puede disponer libremente.

Así, siempre es posible legar una parte de los bienes a una ONG cuando se respete la «legítima», la herencia que tiene que ir obligatoriamente a los herederos legales, llamados «forzosos»: en primer lugar, son los hijos; en su defecto, los nietos; y a falta de ambos, los ascendentes. Asimismo, el cónyuge vivo puede concurrir tanto con ascendentes como con descendientes.

Una vez fallecido el testador, el notario que haya autorizado el testamento está obligado a notificar su nombramiento como beneficiaras a las entidades no lucrativas que aparezcan en el mismo.

Libres de impuestos

También hay que tener en cuenta que las donaciones a las ONG están exentas de muchos de los impuestos que se pagan tras recibir una herencia, como por ejemplo:

• Impuesto de sucesiones
• Plusvalía municipal
• Impuesto sobre bienes inmuebles (IBI)

Por lo tanto, todo el patrimonio que reciben las ONG a través de los testamentos solidarios se puede destinar íntegramente a causas benéficas.