Los helicópteros turísticos de Barcelona están en concurso de acreedores
Cat Helicòpters acaba en los juzgados por las malas relaciones entre sus tres socios
«No paramos, estamos volando más que nunca», asegura Amelia Barrigón, directiva de Cat Helicòpters, la compañía que realiza vuelos turísticos sobre el litoral y la ciudad de Barcelona.
Pese a registrar una gran demanda de vuelos, Cat Helicòpters se acogió en mayo pasado a un concurso voluntario de acreedores.
Amelia Barrigón insiste en la «buena marcha» de la compañía y en que están cumpliendo los compromisos con la plantilla, integrada por 24 empleados, entre pilotos, mecánicos y personal administrativo.
El concurso de acreedores de Cat Helicòpters no estaría relacionado con los resultados de su actividad turística, sino con las «discrepancias entre sus accionistas», según reconoce Jordi Cabarrocas, uno de sus tres socios.
En declaraciones a Economía Digital, Cabarrocas confirma las «malas relaciones» con un socio, pero declina precisar el importe de la deuda acumulada porque no se encarga del día a día de la compañía.
Los socios se cruzan demandas en los juzgados
Los socios de Cat Helicòpters son los barceloneses Jordi Cabarrocas, Jorge Barrigón y el empresario andorrano Antoni Rebès, que hasta hace un año presidió la compañía. Precisamente, los dos accionistas catalanes mantienen un enfrentamiento con el andorrano Rebès. Las dos partes se han cruzado demandas en los juzgados de Andorra y de Barcelona.
Un digital andorrano situó el pasivo de Cat Helicòpters en unos 100 millones de euros. La compañía no ofrece información al respecto. Fuentes del sector rebajan esta cifra y apuntan que las discrepancias entre los socios, reconocidas por ellos mismos, estarían relacionadas con aventuras empresariales fallidas en Ceuta y en Andorra.
Sobrevolar Barcelona durante 12 minutos cuesta 95 euros
Cat Helicópters centra su actividad en los vuelos turísticos. Amelia Barrigón señala que los paquetes más solicitados son el vuelo por la costa (de 5 minutos de duración y un precio de 45 euros por persona), sobre Barcelona (12 minutos y 95 euros) y la ruta que incluye el sobrevuelo de la ciudad y del macizo de Montserrat (35 minutos y 300 euros).
Al contrario de lo que cabría imaginar, el 80% de los usuarios de estos vuelos turísticos residen en Barcelona o en su área metropolitana. El turista extranjero tan solo supone el 20%.