La vicepresidenta, sobre Andalucía: «lo que empezó como error, acaba en fracaso»
Díaz debe asumir las consecuencias de disolver el Parlamento andaluz cuando no era necesario
La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, ha querido salir al paso de las acusaciones de la presidenta andaluza, Susana Díaz, relativas a que el Gobierno estaba poniendo trabas para evitar que se pueda alcanzar un acuerdo de investidura en Andalucía. «Lo que empezó como un error, acaba en fracaso de Díaz», decía la vicepresidenta en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros.
En su respuesta, Sáenz de Santamaría aludía al hecho de que «la decisión de disolver el Parlamento andaluz fue de ella, sin necesidad de hacerlo, y es ella la que debía haber tenido en cuenta que pasara lo que está pasando». «El Gobierno de la Nación no es responsable de que Díaz decidiera disolver el Parlamento de Andalucía», apostillaba.
La vicepresidenta cree que, perfectamente, Díaz podía haber esperado a convocar las elecciones andaluzas para hacerlas coincidir con las autonómicas y locales del próximo 24 de mayo.
Incidiendo en este asunto, la vicepresidenta acusaba a la presidenta andaluza de estar haciendo una cierta dejación de funciones. «Estamos viendo serias deficiencias de gestión, como en lo referido a la mina de Aznalcóllar, que exigen de la presidenta una respuesta que no se está produciendo», reprochaba.