El reloj del mejor inversor de España
Un guardia urbano catalán consiguió rentabilidades del 1.400% y del 4.500% en el concurso que convoca cada año el operador bursátil por internet XTB
El mejor inversor de España es un catalán de 35 años que no se dedica profesionalmente a este cometido. Se llama Jordi Güell y es guardia urbano en una población de la costa catalana. El premio a su destreza, un lujoso reloj, se lo ha concedido el operador de bolsa por Internet XTB, que anualmente realiza un concurso en toda Europa que se concreta en cada país. Güell ha resultado ser el quinto inversor más hábil del continente y el primero de España.
“Todo empezó porqué un día recibí un correo que me invitaba a descargarme una versión informática que permite hacer inversiones en versión demostración y empecé a hacer prácticas. Posteriormente me invitaron a inscribirme en el concurso, lo hice y hasta aquí…”, explica, Güell, justo en el momento en que se desplaza desde Barcelona a Madrid para recibir el premio al mejor inversor español.
El mecanismo del concurso lo cuenta el propio ganador: “Te dan 30.000 euros virtuales que puedes invertir en tres categorías a razón de 10.000 euros en cada una. Un primer paquete en opciones; un segundo en acciones y el tercero en el mercado Forex, que incluye metales preciosos, petróleo e indices”. El certamen concede premios por cada apartado y en el global, a nivel europeo y también en cada país. En este sentido, Güell invirtió siguiendo sus conocimientos e inspiración. El resultado fue que la cifra inicial se multiplicó hasta llegar a los 465.000 euros.
“La rentabilidad conseguida fue en el ámbito global del 1.400% y en el Forex del 4.500%. Esto me situó en el primer puesto a nivel español y el quinto de Europa a nivel global, mientras que en el apartado Forex, llegué al tercer puesto en el conjunto europeo”, explica sin dar mucha importancia a su éxito.
Autodidacta en bolsa
Este policía local ya tenía experiencia en operar en los mercados de valores: “Hace 11 años entré en renta variable, fue en el momento álgido de la burbuja tecnológica y, como era de esperar, cuando explotó tuve pérdidas. Entonces era autodidacta sin un conocimiento profundo de la lógica de los mercados”.
Con la misma tranquilidad con la que relativiza el ser considerado el mejor inversor español, Jordi Güell asegura que, de haber realizado las inversiones con su dinero, el resultado habría sido muy diferente. “Es distinto operar a través de la plataforma que jugar con dinero real, la presión psicológica es otra y seguramente las equivocaciones serían mucho mayores. Con dinero virtual arriesgas sin miedo y no temes al apalancamiento, que te puede hacer ganar mucho y también ocasionarte grandes pérdidas”. Pero aún así, y con la boca pequeña, Güell se ve capaz de conseguir beneficios equivalentes a una décima parte de lo obtenido en el mundo virtual: 140% y 450%, aunque por prudencia no apueste fuerte.
Policía estudioso
Por el momento, el policía local mantiene su dedicación profesional junto a las inversiones. “Si hubiese conseguido el primer premio europeo quizá me hubiese planteado dar el salto a la profesionalidad”. El primer premio en España es sobre todo honorifico: un reloj marca Milus valorado en 8.800 euros y, lo que más aprecia, un curso MBA en la European Bussiness School, que como casi todo, se puede seguir a través de Internet.
Aunque hay otros premios más sustanciosos si el galardón conseguido es el europeo: un millón de euros en metálico al que consigue en bloque la mayor rentabilidad, en este caso el ganador ha sido un inversor eslovaco. Y los que triunfan en cada una de las categorías: en opciones, renta variable y forex, son premiados con un Mercedes en cada ocasión, además de con sendos relojes.
Apoyo a las cajas de ahorros
Jordi Güell relata que no es una persona lanzada. Así, sin entrar en detalles, el mejor inversor español del concruso se ve capaz de analizar la actualidad financiera. Por ejemplo, considera positiva la operación puesta en marcha por diversas cajas de ahorros para conseguir fondos en bolsa: “Supongo que aportarán más credibilidad y transparencia a este tipo de entidades”. Aunque como inversor lo vería positivo solo a largo plazo.
Para el ganador del concurso al mejor inversor español este es momento de salir de la renta variable, esperar a que las empresas toquen fondo y comprar cuando se inicie la recuperación con precios baratos y mucho recorrido. Así explicado, parece sencillo.