El Mobile World Congress vive en 2022 su particular día de la marmota. La edición de la feria de móviles se celebrará en principio con normalidad, pero la evolución de la pandemia levantó la alerta entre expositores y asistentes sobre la viabilidad de la organización. En juego está un impacto de casi 500 millones de euros para Barcelona en condiciones normales.
Es prácticamente imposible saber el impacto económico que el evento tendrá para la ciudad. En 2021, John Hoffman, presidente de la organización, aseguraba que sería de “entre 100 y 200 millones de euros”, aunque se trató de una edición de transición, mayormente con congresistas locales. En 2020 no se celebró, pero en 2019 alcanzó una aportación récord de 492 millones de euros.
La cifra sin embargo ya se daba por supuesto que se tocaría debido a que la pandemia todavía afecta a la movilidad. Más con la variante ómicron, que ha provocado la suspensión de muchos vuelos y que varios países vuelvan a imponer severas restricciones.
De este modo, queda por ver el impacto económico que tendrá el Mobile. Aunque no hay previsiones, en 2019 se superaron los 100.000 visitantes procedentes de 200 países diferentes. Además, se esperaba alcanzar los 3.000 expositores y patrocinadores.
Sony será baja
El primero en confirmar que no estará fue Sony, que explicó este jueves que no estará de forma presencial. La firma ya fue baja en las edición de 2021 y no estaba entre los expositores confirmados por la propia GSMA. Es la primera ausencia confirmada para el evento, que se celebrará entre el 28 de febrero y el 3 de marzo.
A pesar de la incertidumbre, oficialmente nadie quiere oír hablar de cancelar el Mobile. Sin embargo, a nadie se le escapa el incremento de contagios de Covid-19, debido, en buena parte, a la irrupción de la variante ómicron, en Europa.
Aunque el Gobierno mantenga su política de rechazar las restricciones más severas gracias al alto porcentaje de vacunación existente en España, el problema llegará si las limitaciones las imponen los países de origen de los congresistas. Limitaría la asistencia al tener que guardar cuarentenas a su regreso o ver como se suspenden vuelos por la variante ómicron.
Por ello, las grandes telecos presentes consideran que, de incrementarse las restricciones, la GSMA debería actuar con la mayor rapidez posible para evitar un goteo de bajas como el de 2020 que dañe la reputación del Mobile otra vez.
¿Otro Mobile de transición?
Todo parece indicar que la edición de 2022 volverá a ser de transición, como ya fue la de 2021. Sí piden a la organización celeridad en caso de que suban los contagios para evitar la crisis reputacional. En un máximo de dos semanas, el destino de la feria debería estar claro. Entre las grandes marcas se agradeció la carta realizada por el presidente de la GSMA, John Hoffman, en la que expresó su “voluntad inquebrantable” de que el evento se celebrase como estaba previsto.
Desde el Gobierno mientras prosiguen con su política de evitar suspensiones y restricciones severas gracias al porcentaje de vacunación de los españoles. “Debemos continuar atentos a la evolución de la pandemia, pero siempre que se respeten los protocolos marcados por las instituciones, se puede llevar a cabo un Mobile World Congress presencial, igual que se va a hacer Fitur la semana que viene”, explican.