Sol Daurella vuelve a cargar contra Alberto Garzón. Coca-Cola Europacific Partners, controlada y presidida por la empresaria española, incrementó un 30% en la región Iberia —España, Portugal y Andorra–, pero la felicidad no fue completa: la subida del IVA a las bebidas azucaradas volvió a segar los ingresos procedentes de los supermercados, donde los clientes más notan un incremento de los precios.
La embotelladora europea del popular refresco hizo públicos este miércoles los resultados del primer trimestre, que se saldó con unos ingresos globales de 3.709 millones de euros, el 62% más que en el mismo periodo de 2021. En Iberia, la facturación alcanzó los 543 millones de euros, el 29,5% más gracias a la reapertura de los bares y restaurantes.
«Hemos tenido un fantástico comienzo de año, con un fuerte crecimiento de los ingresos y un aumento de la cuota de valor. celebró el consejero delegado de Coca-Cola Europacific Partners, Damian Gammell. Del mismo modo que hizo The Coca-Cola Company, admitió una subida de los precios, en la línea de toda la industria de la alimentación.
En España, el avance se produjo gracias al fin de las restricciones y productos como la Coca-Cola Zero y la bebida energética Monster. Los ingresos también subían al incremento de los precios. Sin embargo, la organización lamenta que el negocio en los supermercados sufre desde que se implementó la subida del IVA las bebidas azucaradas, que saltó desde el 10% al 21% a propuesta del Ministerio de Consumo, liderado por Alberto Garzón.
El tributo pretende recaudar 300 millones de euros al año y solamente se aplica a las ventas en supermercados para no golpear a la hostelería.
En anteriores ocasiones, desde Coca-Cola Europacific Partners (CCEP) declinaron ofrecer más detalle a la información. Es más, incluso pareció recular. Una portavoz de la empresa admitía que no contaban con «una estimación precisa» para calcular el golpe de la subida tributaria.
Coca-Cola es optimista pese a la inflación
La firma aspira a mantener la tendencia cosechada en el primer trimestre durante lo que queda de 2022, más cuando se acerca un verano en el que no se vislumbran excesivas restricciones en el horizonte. «Mantenemos la previsión del crecimiento de nuestro beneficio operativo comparable de entre el 6 y el 9%», añadió Gammell en un comunicado.
Las tensiones llegarán por la subida de los precios de las materias primas, con productos como el azúcar o el aluminio de las latas afectados también por la guerra de Ucrania. «Aunque esperamos ver una mayor recuperación del volumen y del mix, somos conscientes de que las presiones inflacionistas nos sitúan en un escenario más incierto. Por ello, seguimos gestionando nuestras palancas clave de precios, de gasto promocional y eficiencias en todo nuestro negocio», señaló el dirigente.