La Audiencia Nacional rechaza suspender el impuesto a la banca
La Audiencia Nacional ha desestimado los recursos presentados por Bankinter, Kutxabank y el Banc Sabadell al considerar que no les causa un perjuicio irreparable
La Audiencia Nacional ha rechazado suspender de forma cautelar el impuesto extraordinario a la banca impulsado por el Gobierno de Pedro Sánchez, después desestimar los recursos presentados por Bankinter, Kutxabank y el Banc Sabadell, al considerar que no les causa un perjuicio grave ni un perjuicio irreparable.
Los magistrados de la sala de lo contencioso han rechazado la suspensión sin entrar en la legalidad de la tasa y también han descartado elevar esta cuestión al Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE), según han informado fuentes judiciales a Efe.
El impuesta a la banca fue aprobado como medida excepcional durante la crisis inflacionista por la guerra en Ucrania. Con ello, las entidades financieras cuyos intereses y comisiones superaron los 800 millones en 2019, deben abonar un tipo del 4,8% de la suma de sus ingresos netos por intereses y comisiones en España.
Con ello, el Ejecutivo pretender recaudar unos 1.500 millones en 2023 tomando como referencia las cuentas de 2022, y otros 1.500 millones en 2024, sea más equitativo y se distribuya entre un mayor número de entidades.
Caixabank, la más afectada
Entre las entidades, Caixabank será la entidad a la que más afecte el impuesto con un pago de alrededor de 400 millones de euros. Por su parte, Santander y BBVA le seguirían con unas cifras de alrededor de 225 millones de euros. Mientras que Sabadell estima que el pago sea de unos 170 millones de euros y Bankinter apunta a una horquilla de entre 80 y 100 millones de euros. Unicaja no ha dado estimaciones de la cifra del impuesto.
En febrero, las dos patronales bancarias, AEB y CECA, interpusieron dos recursos contencioso-administrativos ante la Audiencia Nacional contra la orden ministerial donde se recoge el impuesto extraordinario.
Calviño no descarta mantener el impuesto
Recientemente, la vicepresidenta primera del Gobierno en funciones, Nadia Calviño, no descartaba mantener en tiempo el impuesto extraordinario a la banca, según expuso en una entrevista en la Cadena Ser. Sin embargo, la vicepresidenta económica advertía que esta decisión estará condicionada a cómo evolucione la situación económica y presupuestaria y los beneficios del sector financiero.
«En la medida en que haya beneficios extraordinarios, pues habrá que considerarlo. Pero vamos a ver cómo sigue evolucionando la situación económica, la situación presupuestaria y cómo siguen evolucionando los beneficios del sector bancario», dijo la también ministra de Economía en funciones.