Ahorro energético: todas las ayudas para poner en tu casa aerotermia

Con la inflación disparada y el precio de la energía por las nubes, las familias buscan la forma de climatizar sus hogares sin que suponga un gran desembolso. Está difícil. Según la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), «cada hogar se gasta unos 750 euros al año en calefacción». Esta es la media en viviendas de en torno a 90 metros cuadrados, por lo que, con el fin de ahorrar, la OCU destaca dos tecnologías que podrán rebajar la factura: la aerotermina y la calefacción con biomasa.

Los sistemas aerotermia son bombas de calor de última generación diseñadas para aportar refrigeración en verano, calefacción en invierno y, si se desea, agua caliente todo el año, explican desde la compañía Toshiba. Su funcionamiento consiste en extraer energía ambiental contenida en la temperatura del aire, incluso bajo cero y la transfiere a la habitación o al agua corriente.

Ventajas de la aerotermia

Según Toshiba, la aerotermia cuenta con numerosas ventajas:

Alta eficiencia. Consume menos energía (kWh) que los sistemas de calefacción tradicionales y eso se aprecia en la factura mensual.
Es una energía renovable, recogida como tal en el CTE (Código Técnico de la Edificación).
Es sostenible, y así está clasificada por la Unión Europea.
No requiere casi mantenimiento, es como un electrodoméstico más.
No produce combustión (no hay caldera). No hay humo ni residuos. Es más segura.
Toda la casa puede funcionar exclusivamente con electricidad, sin necesidad de contratar gas o suministros de combustible. Puede ofrecer aire acondicionado.
Agua Caliente de bajo coste.
La instalación aerotemia es mucho más sencilla y mejor que una de funcionamiento con energías no renovables.
Se pueden combinar sus salidas (radiadores tradicionales, suelo radiante, bombas de calor, etc.)
Es la calefacción con menor consumo energético.

Inversión inicial cara

Esto se consigue mediante el ciclo termodinámico que utiliza un gas refrigerante comprimido a bajísimas temperaturas para extraer calor del aire exterior. ¿El problema? La inversión inicial para este tipo de tecnología no está al alcance de todos. Según los expertos de Selectra puede oscilar entre los 8.000 y los 24.000 euros. Es cierto que se amortiza con el posterior ahorro energético. Y, además, hay ayudas.

Las subvenciones provienen del Plan de Recuperación para Europa Next Generation EU y del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia de España, según detalla Selectra. «Estos fondos pretenden incentivar la creación de instalaciones verdes, favoreciendo la transición desde las energías fósiles a las renovables y, con ello, reducir las emisiones de óxidos de nitrógeno y dióxido de azufre», agregan.

Estas subvenciones están reguladas en el Real Decreto 477/2021, de 29 de junio, y el plazo de solicitud está abierto hasta el 31 de diciembre de 2023. Este programa «incluye entre sus actuaciones subvencionables la tecnología solar térmica, biomasa, geotérmica, hidrotérmica o aerotérmica (exceptuando las tecnologías aire-aire) para climatización y/o agua caliente sanitaria en viviendas. Las ayudas varían entre el 40% al 70%, en función de la tecnología utilizada», explican desde el Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE).

Ayudas para instalar aerotermia

Las ayudas para la instalar aerotermia se componen de dos partes. Según explica Selectra, está la ayuda base, que es «valor fijo por unidad de potencia de la bomba de calor de aerotermia». La cuantía base de las ayudas quedaría así:

Sector residencial: 500 euros/kW de ayuda con un valor máximo de ayuda de 3.000 euros/vivienda.
Viviendas de propiedad pública y tercer sector: 650 euros/kW de ayuda con un valor máximo de 3.900 euros/vivienda.

La otra ayuda adicional es la que se suma a la base y que se otorga si se tiene que adecuar el sistema de calefacción al nuevo equipo de aerotermia para obtener un mayor rendimiento. Aquí se incluiría el suelo radiante o radiadores de baja temperatura. Las aportaciones económicas serían las siguientes:

Suelo radiante: ayuda de 600 euros/kW y valor máximo de 3.600 euros.
Radiadores de baja temperatura: ayuda de 550 euros/kW y valor máximo de 1.830 euros.