Primera prueba del Peugeot 408: El puente al coche del futuro que puedes comprar hoy
El nuevo Peugeot 408 llega a nuestro mercado en versiones de gasolina, PHEV y, próximamente, eléctrica. Nos hemos puesto al volante por primera vez
Probablemente su carrocería no te dejará indiferente. No hay nada especialmente rompedor si descomponemos su silueta y analizamos cada volumen y cada componente independientemente, pero sí es difícil encontrar un vehículo que, comparado directamente con el Peugeot 408, sea, digamos, parecido.
El nuevo modelo del fabricante francés no solamente estrena nombre (si obviamos el Peugeot 408 que se vende desde 2010 en Asia, Sudamérica o Rusia y que no está emparentado técnicamente con el coche que hoy probamos), sino que además parte de una plataforma igualmente novedosa: la EMP2 V3, compartida con otros productos de Stellantis como los Citroën C5 X, DS 4 II, Opel Astra L y la tercera generación del Peugeot 308.
Así es y será el Peugeot 408
Hablamos de una berlina de 4,69 metros y dos volúmenes que presenta una línea de techo descendente en ángulo agudo (lo que algunos denominan fastback mientras otros prefieren hablar de coupé), tomando también elementos del mundo SUV como los arcos que ensanchan los pasos de rueda, las taloneras y la zona baja de los parachoques, revestidas de un plástico sin pintar, o la elevada altura libre al suelo (18,8 cm) que agradecerán quienes guarden sus vehículos en garajes con rampas abruptas, ya que la distancia entre ejes (2,79 metros) es también considerable.
Este crossover llega al mercado con un motor de gasolina y dos sistemas de propulsión híbridos enchufables (PHEV), siempre con tracción delantera, y en 2024 se sumarán las versiones 100 % eléctricas.
Pero hoy hemos podido ponernos al volante de la variante de gasolina, la más asequible, propulsada por el conocido y vanguardista motor 1.2 Puretech tricilíndrico sobrealimentado por turbocompresor, que rinde 96 kW (131 CV) y 230 Nm. Va acoplado a una caja de cambios automática convencional de ocho velocidades, y ofrece un rendimiento suficiente para la inmensa mayoría de usuarios, con una respuesta nada perezosa a bajo régimen, maniobras suaves en las inmediaciones del régimen de ralentí (una importante ventaja frente a sus rivales con caja de cambios de doble embrague) y un consumo homologado de 6,0 litros cada 100 km que, obviamante, crecerá bastante en entornos urbanos y puede rebajarse si circulamos por autopista con poca carga y con el control de velocidad de crucero adaptativo conectado para evitar que excedamos involuntariamente la velocidad máxima, algo relativamente sencillo por la buena insonorización, la confianza que transmite al volante y un reglaje estándar de la curva de respuesta del acelerador bastante generoso.
Interesantes equipamientos tecnológicos en el Peugeot 408
Sobre el control de crucero adaptativo hay que destacar su buen funcionamiento y la incorporación de prestaciones como la asistencia automática al adelantamiento, que nos traslada al carril izquierdo cuando vamos precedidos de un vehículo más lento y accionamos el intermitente correspondiente, y también nos devuelve al carril derecho una vez acabada la maniobra.
En cuanto al comportamiento, en general, está en línea con lo que se espera de cualquier Peugeot, con unas suspensiones firmes pero no incómodas que contienen la inclinación de la carrocería tanto longitudinal como transversalmente, unos amortiguadores que devuelven la carrocería a su posición sin remolonear y sin sobreactuar, así como una dirección precisa y asistida en su justa medida.
Diez años después del lanzamiento del “i-cockpit”, la pantalla digital que muestra la información por encima del volante en lugar a través del hueco que queda enmarcado por la parte superior del aro y los radios centrales, sigo sin ser fan de su pequeño volante achatado, pero lo cierto es que acabas acostumbrándote.
Quizá te lleve más tiempo hacerte a su instrumentación tridimensional, que muestra abundante información en varias capas que se superponen con diferente profundidad de campo. Y cuando ya estés familiarizado, puedes sacar bastante partido a sus cuatro pantallas personalizables.
También lleva un tiempo (quizás más) hacerse con el manejo de la interfaz multi-media a través de la pantalla táctil central de 10”, que en su base incluye una batería de pulsadores configurables. Una vez más, entendemos que acceder a funciones como el reglaje de la climatización debería ser más sencillo de lo que en realidad es.
Un interior familiar y versiones PHEV para el Peugeot 408
En realidad, el interior resulta familiar, ya que todo el salpicadero es casi idéntico al del Peugeot 308, del cual se diferencia especialmente en la amplitud de las plazas traseras, condicionada por su mayor distancia entre ejes. Con respecto al maletero, disfrutaremos de entre 454 y 536 litros en función de si elegimos un PHEV con equipo de sonido Focal (tanto las baterías como el subwoofer restan algo de espacio) o un gasolina sin este extra.
En esta ocasión no hemos tenido ocasión de conducir los PHEV, que ofrecen 180 o 225 CV gracias a la combinación de un motor eléctrico de 81 kW (110 CV) con un 1.6 de gasolina que entrega 150 CV o 180 CV. El motor eléctrico se alimenta de una batería de 10,2 kWh netos (12,4 kWh brutos) que puede recargarse en la red doméstica con una potencia de hasta 7,4 kW y ofrecer hasta 64 kilómetros de autonomía puramente eléctrica; un buen valor para una batería de esa capacidad.
La gama del Peugeot 408 se completará con versiones puramente eléctricas integradas en el ambicioso programa de electrificación del fabricante francés, que prevé lanzar cinco coches 100 % eléctricos de aquí a 2025. Asimismo, los Peugeot 3008 y 5008 comenzarán a ofrecer en breve la hibridación ligera, lo que supondrá un nuevo hito para Peugeot al lograr disponer de variantes electrificadas en toda su gama, si bien hasta 2025 no habrá una variante 100 % eléctrica para todos sus modelos.
Por último pero no por ello menos importante, nos queda hablar de la oferta comercial, compuesta por tres acabados y un interesante precio base de 33.350 euros. Asimismo, hay disponible una oferta de financiación que deja la cuota mensual en 290 euros.
Con todo ello, no cabe duda de que Peugeot tiene un producto suficientemente atractivo para seguir siendo un importante actor del segmento D, que tradicionalmente ha sido uno de sus puntos fuertes, incluso ahora que los motores diésel (otra de las tradicionales fortalezas de Peugeot) dejan de estar presentes, por primera vez en décadas, en un nuevo lanzamiento del fabricante francés.
Las claves del Peugeot 408
- Nuevo modelo, encuadrado en el segmento D.
- Dimensiones: 4,69 x 1,85 x 1,48 metros.
- Motores de gasolina (130 CV) y PHEV (180 y 225 CV).
- En 2024 habrá versiones 100 % eléctricas.
- Tres acabados: Allure, Allure Pack y GT.
- Gasolina: 6,0 l/100 km. Etiqueta C.
- PHEV: 64 km de autonomía eléctrica. Etiqueta Cero.
- Precio gasolina: desde 33.350 euros.
- Precio PHEV: desde 42.250 euros.