Ximo Puig sonrió ayer de oreja a oreja mientras veía como el cuarto teniente de alcalde de Valencia, el joven socialista Borja Sanjuán, que fue su asesor en la pasada legislatura, pronunciaba uno de los discursos de inauguración del emobility World Congress (sustituyendo a Joan Ribó, que se dio de baja a última hora). Defendió la movilidad sin fanatismos, que es una de las banderas económicas del PSOE valenciano, mientras los independentistas son más de “molestias generadas” con carriles bici. Así lo dijo Ribó hace un mes cuando sí que fue a la presentación del congreso de movilidad para abogar por eliminar coches.