El coronavirus impacta en el sector inmobiliario
El brote del coronavirus (COVID-19) redujo las esperanzas de que se produjese una recuperación del crecimiento macroeconómico en todo el mundo
Las bolsas adoptaron una postura de aversión al riesgo a mediados de enero. Efectivamente, el brote del coronavirus (COVID-19) redujo las esperanzas de que se produjese una recuperación del crecimiento macroeconómico en todo el mundo.
Con estos mimbres, la naturaleza defensiva de la renta variable inmobiliaria ha contribuido a que “el sector registre una rentabilidad superior a la de la renta variable en general —tanto mundial como asiática— desde que comenzó el brote”, tal y como analizan desde el equipo de renta variable inmobiliaria de Janus Henderson.
Si se analizan latitudes más cercanas a la zona cero, se puede ver que las bolsas asiáticas se han quedado atrás “respecto de la mayoría del resto de mercados”, especialmente en Hong Kong, que ha sido “el mercado más perjudicado por las ventas masivas”.
En este sentido, sobre el terreno, los mercados y sectores relacionados con la distribución y el turismo han sufrido “las repercusiones más significativas”.
Efectos en el sector inmobiliario
El brote de COVID-19 está teniendo algunas consecuencias indirectas para el sector inmobiliario al acentuar los cambios de tendencia propiciados por los avances tecnológicos y los cambios en el estilo de vida, que están modificando “la demanda y el uso de los activos inmobiliarios”, tal y como destacan desde Janus Henderson.
Siguiendo este esquema, más allá de las repercusiones directas más evidentes para los sectores hotelero y de distribución, el sector inmobiliario “podría verse afectado a medio o largo plazo” para estos expertos.
En Asia, el brote de coronavirus ha llevado a numerosas empresas a implementar diferentes planes de trabajo en remoto, lo que evidencia la viabilidad de las soluciones de entornos laborales flexibles y podría cambiar “la manera en la que las empresas abordan sus necesidades de espacio físico de oficinas en el futuro”, analizan.
Posicionamiento de las carteras para la coyuntura actual y futura
¿Cómo posicionarse como inversor inmobiliario ante este panorama? Según Janus Henderson, al integrar las tendencias disruptivas que conllevan los avances tecnológicos y los cambios demográficos, cuentan con un posicionamiento orientado hacia sectores que, en su opinión, “se están beneficiando de factores favorables estructurales”.
Esto incluye una sobreponderación en el sector logístico/industrial, una actitud sumamente selectiva respecto de los propietarios de oficinas y de inmuebles comerciales e invertir en sectores especializados no estratégicos, “como los centros de datos, las torres de telefonía y las comunidades de viviendas prefabricadas”.
Si bien, por lo general, mantienen una postura neutral para gestionar el riesgo de país, su mayor infraponderación en términos de país ha sido Hong Kong, donde “los fundamentales han mostrado debilidad”.
Noticia original: Business Insider
Autor: Héctor Chamizo