Las grandes socimis cambian de ciclo: es la hora de vender en EspaƱa
Las grandes inversoras inmobiliarias encaran 2019 poniendo el foco en las ventas, aunque seguirĆ”n explorando el mercado a la bĆŗsqueda de oportunidades
Las grandes dominadoras del mercado inmobiliario se mueven en el segmento de la venta. Tras años dominando el sector de desde el punto de vista de las adquisiciones, los activos ya comienzan a cumplir su ciclo en los balances de las socimis, que seguirán con su plan de rotación de activos.
Las fuentes constultadas hacen referencia a las dos socimis españolas, Merlin Properties y Colonial. Tras protagonizar el mercado de la compra en 2018, comenzarán a ser muy activos en el de la venta.
Ā«Las socimis ya empiezan a vender parte de sus activos al haber cumplido su ciclo en cartera para que se revaloricenĀ», señalan desde la consultora Savills Aguirre Newman. Y en 2019 la tendencia seguirá: Ā«Las grandes socimis también tendrán un importante papel vendedorĀ».
En la misma línea se expresan desde Cushman & Wakefield: Ā«Lo más probable es que a cierre de 2019 nos encontremos con socimis más pequeñas pero con mayores rentasĀ», señalan.
Los primeros movimientos ya comienzan a dejarse ver y, por ejemplo, Colonial ya vendió el hotel Tryp Chamartín a Meridia Capital la semana pasada. Ā«Es probable que acaben deshaciéndose del logístico heredado de AxiareĀ«, añaden en Cushman.
Desde Merlin aseguran que las desinversiones serán en las afueras de Barcelona y Madrid, donde los activos no son estratégicos, y en la división de centros comerciales, en la que sólo les interesan los establecimientos urbanos o de muy gran tamaño. En cambio, las compras serán especialmente en Lisboa, la ciudad en la que vislumbran mayor potencial de crecimiento.
¿Y sus activos?
Orientadas especialmente a las oficinas, el alquiler volverá a estar marcado por la escasez. En la capital catalana, por ejemplo, la disponibilidad fue sólo del 5,44% en 2018, la más baja desde 2001, y sólo se crearon 140.000 metros cuadrados más en todo el año –el stock total supera por poco los seis millones–, casi todo en zonas como el 22@.
Ante la falta de oferta y las nuevas compañías interesadas en asentarse en Barcelona, el precio sigue al alza: en las zonas prime y el 22@ el coste del metro cuadrado creció a doble dígito hasta los 22,8 euros y los 17,4 euros, respectivamente.