Alquilar un piso en Barcelona cuesta el triple que en Extremadura
Los precios del alquiler se encogen el 1,1% en mayo, pero el interanual revela un encarecimiento del 3,7%
Los alquileres en España se toman un ligero descanso. “Las subidas interanuales no son tan intensas ni generalizadas”, dicen los expertos. Los precios cayeron el 1,1% en mayo respecto a abril, pero en el interanual crecieron el 3,7%. A pesar de la tendencia generalizada, las diferencias entre territorios son abismales: una renta en Barcelona cuesta el triple que en Extremadura.
Según las cifras de Fotocasa, el precio medio del alquiler en la capital mediterránea es de 15,98 euros el metro cuadrado, siendo la ciudad más cara de todo el país. Sarriá-Sant Gervasi (17,28 euros) y Ciutat Vella (17,16 euros) son los dos barrios más exclusivos de la urbe.
Segunda es Madrid, con un precio de 14,27 euros el metro cuadrado. El distrito de Salamanca continúa siendo el más caro de España, con un precio medio de 17,70 euros. El más barato de la capital es Villaverde, que tiene un precio medio de 9,59 €/m2 al mes.
En cambio, el país también tiene otra cara muy distinta. Extremadura es la Comunidad Autónoma más barata, con un precio medio de 4,70 euros el metro cuadrado. Le siguen Castilla-La Mancha (5,06 euros) y La Rioja (5,36 euros). “Las tensiones se registran en grandes ciudades como Madrid, Valencia y algunos puntos turísticos”, señalan desde la inmobiliaria.
La media en España
La media española se situó en mayo en 8,44 euros el metro cuadrado. Las cifras del mes de abril (8,53 euros) devolvieron al territorio a los registros de 2010, pero todavía lejos de los máximos de mayo de 2007, cuando la vivienda tocó los 10,12 euros el metro cuadrado. El margen de crecimiento todavía es del 16,6%.
A nivel interanual, el coste se incrementa un 3,7% en mayo y se incrementa en 14 comunidades autónomas. Canarias es la comunidad que registra el incremento interanual más acusado (8%), seguida de Madrid (7,4%), la Comunitat Valenciana (7,3%) y Castilla-La Mancha (4%).
Además, el precio de la vivienda en alquiler lleva ya 39 meses consecutivos con incrementos interanuales. Por ello, y a pesar del freno en la velocidad de crecimiento, todavía sigue en una clara tendencia alcista.