Si cae Ayuso también caerá Arrimadas

La debacle que causaría en Ciudadanos una moción de censura a Ayuso sería tan completa y dramática que a Arrimadas no le quedaría otro remedio que dimitir

Inés Arrimadas se juega todo su futuro político en Madrid.

Como lo oyen, ni en el Baix Llobregat, ni en el Barcelonès ni en el Vallés Oriental,  Arrimadas se juega su resultado en las elecciones catalanas y con él la posible extinción de su partido por-los-siglos-de-los-siglos-amén en la decisión que ha de tomar sobre la velada moción de censura a Isabel Díaz Ayuso en la Comunidad de Madrid.

Y voy a tratar de explicarme porque esta es una de las consecuencias más evidentes y menos analizadas del entretenidísimo juego de seducciones mutuas que se traen entre manos Ciudadanos y los Socialistas en la Comunidad de Madrid.

Los viajeros del carro de Pedro Sánchez

Miren, la mera amenaza de moción de censura en Madrid, motivada o no, es una pésima idea para Cs en su conjunto, ya que en medio de la debacle que le anuncian los sondeos a nivel nacional al partido naranja, esta se agravaría al aparecer unidos definitivamente al carro de Pedro Sánchez en dos eventos políticos de gran magnitud: los presupuestos generales del estado y dicha moción.

Un carro ciertamente tóxico para Cs el de Sánchez, ya que lleva subido al mismo a todas las tribus independentistas del universo, muy dignas ellas, pero escasamente votables por los electores de un partido construido desde el jacobinismo y la lucha contra el independentismo catalán.

Un partido en el que las decisiones se toman en Barcelona y cuya presidenta, Inés Arrimadas, le debe toda su carrera política a haber vencido a los nacionalistas en unas elecciones autonómicas, toda una proeza.

Rumbo a las elecciones catalanas sin explicaciones

Y si ver a Inés Arrimadas encaramada a ese carro y azuzando a los bueyes de Sánchez es grave en Murcia, Cuenca o Valladolid, que no tienen elecciones hasta dentro de 3 años, en una Cataluña que va a las urnas dentro de 4 meses la cosa puede ser dramática.

¿Cómo va a explicar Arrimadas a los ciudadanos catalanes la irresponsabilidad de presentar una moción en plena pandemia en Madrid?

¿Cómo va a contar a sus votantes que va a gobernar en Madrid con populistas (majetes, pero más populistas que Juan Domingo Perón) como Iñigo Errejón y con los socios madrileños de Colau?

¿Cómo va a convencer a sus cuadros de que es mejor entregar el poder al PSOE mientras estos ven que es Ayuso quien se dispara en las encuestas gracias a exvotantes de Cs horrorizados por el giro político de los naranjas?

Estoy convencido de que la debacle sería tan completa, dramática y universal que a la propia Arrimadas no le quedaría otro remedio que dimitir por haber aceptado participar en el entuerto.

Ciudadanos: susto o muerte

Ciudadanos tiene en estos momentos solo dos opciones en las elecciones catalanas: Susto o muerte.

Si es susto perderán más de la mitad de sus diputados, pero no será culpa de Arrimadas, si es muerte significará que han apoyado una moción contra Ayuso, la culpa será solo de ella  y directamente desaparecerán del mapa político español y catalán.

Yo no se si les arriendo la ganancia.

Ahora en portada