Sí a un adelanto electoral

El único camino posible son unas nuevas elecciones porque los que nos han metido en este problema, jamás van a saber solucionarlo

Vergüenza, mucha vergüenza es la que siento ante un gobierno de la nación ausente y débil, que ha permitido lo que nunca debió suceder .

El libertinaje de unos miles de idependentistas ha aplastado la libertad de 47 millones de españoles ante la hundida mirada de un ausente presidente del Gobierno. Una jornada de auténtico fracaso de nuestro sistema democrático y de descomunal fracaso de una clase política inexistente o problemática.

Mi felicitación y reconocimiento a la impecable labor de nuestra judicatura y nuestras fuerzas del orden, en especial a la Guardia Civil y Policía Nacional, por saber estar a la altura de las circunstancias y por ser nuestra última línea de defensa de las libertades.

El libertinaje de miles de independentistas ha aplastado la libertad de 47 millones de españoles

De un plumazo se han cargado nuestra Carta Magna y el inicio de recuperación económica, ya que lo que ha sucedido el 1 de octubre ya ha derivado en una inestabilidad política irremediable, que traerá ahora la inestabilidad económica y social.

Lo veremos en una caída del consumo y un crecimiento del desempleo. Sin seguridad jurídica no hay crecimiento, ni económico ni de ningún otro tipo.

Solo veo un camino posible para intentar frenar esta situación caótica y anárquica, un adelanto electoral en Cataluña y España. Los que nos han metido en este problema, jamás van a saber solucionarlo.

El Ejecutivo de la nación ha escabullido tanto su responsabilidad en el referéndum ilegal que ni han sabido trasladar al resto de Europa los motivos que han llevado a esta situación. No han sabido explicar quienes acatamos la ley y el orden constitucional y quienes no. ¿Cuál ha sido la labor de nuestro ministro de Exteriores?

Basta leer la prensa internacional para darse cuenta de nuestra deteriorada imagen de país

Basta leer la prensa internacional para darse cuenta de la gravedad del problema, de nuestra deteriorada imagen de país y, sobre todo, de la pérdida de confianza.Ya no somos un país estable y tranquilo a ojos del mundo gracias a la CUP, Junqueras, Puigdemont y el del puro, que estaría viendo los partidos de fútbol en vez de dedicarse a gobernar este país. Como siempre, esperando que los problemas se arreglen solos, o se los arreglen otros. El mismo que hace unos días nos decía a toda la nación que sabía lo que se esperaba de él. Pues yo ya solo espero que convoque elecciones y se vaya con su pandilla a otra parte .

De los políticos que gobiernen España y sus comunidades autónomas, sean históricas o no, espero diálogo y acuerdos. Respeto para que nos respeten. Colaboracion y ayuda mutuas. Mentes abiertas con manos extendidas y sin creer ni practicar el pensamiento único. Sentido común y política de Estado. Lo demás solo nos conduciría a un peligroso camino de incalculables consecuencias negativas. Por esto mismo, sabiendo que los actuales responsables políticos nos han metido en el ojo del huracán, creo que el único camino son unas nuevas elecciones con nuevos políticos y pensamientos libres.

Si se pierde el respeto a ley nos lo estaremos perdiendo a nosotros mismos. Ahí se acaba toda convivencia en paz y armonía.