Responsabilidad ante la tormenta inminente

Las guerras comerciales iniciadas por la administración Trump frenará la economía española, que lleva años mejorando sus propias marcas

El Gobierno ha heredado un cuadro macroeconómico excelente que responde al sacrificio de la sociedad española entre 2012 y 2015 y a las medidas y reformas estructurales acometidas por los ejecutivos de Mariano Rajoy. Gracias a ello, España ha logrado tres años consecutivos de crecimiento del PIB superior al 3%, un déficit presupuestario recortado hasta el 3% exigido por la Comisión Europea, un decrecimiento del desempleo oficial al 15% (el real es inferior) y una bajada de la prima de riesgo hasta 87 puntos.

Desgraciadamente, las guerras comerciales iniciadas por la administración Trump provocarán una ralentización fuerte de la economía internacional. Ya han causado caídas sustanciales de las bolsas y aumentos de precios de bienes de consumo e insumos debido a la aplicación de aranceles.

Es bastante probable que Donald Trump imponga en pocas semanas aranceles a la importación de vehículos de la UE, y los volúmenes de exportación de productos chinos sobre los cuales pueden recaer nuevos aranceles son muy elevados: 200.000 millones de dólares.

No se vislumbra un acuerdo para renovar NAFTA y Trump ignora las súplicas de las cámaras de comercio de EEUU y sus agricultores, cuyas exportaciones a Canadá, México, China y la UE ya son objeto de aranceles (como represalia por los de EEUU) en un año caracterizado por una mala cosecha.

Los mayores tipos de interés provocarán una contracción del consumo en EEUU

Las pérdidas de las empresas de EEUU, de sus agricultores y de sus consumidores no parecen influir en un Trump convencido de que los republicanos mantedrán su mayoría en ambas cámaras del Congreso en las legislativas de noviembre.

Harley Davidson ha cifrado sus pérdidas a causa de los aranceles aplicados la semana pasada por parte de la UE en 100 millones de dólares. La multinacional ha anunciado que trasladará parte de su producción fuera de EEUU y no repercutirá el incremento de precio medio de sus motocicletas de 2.200 dólares en sus compradores.

Dichas pérdidas son insignificantes frente a las previsibles si Trump insiste en sus medidas punitivas contra los mayores mercados de exportación de su país: Canadá, México, China y la UE. Asimismo, los mayores tipos de interés provocarán una contracción del consumo en EEUU.

Por otra parte, la Autoridad Bancaria Europea alerta de que los bancos no están preparados para un posible brexit duro en marzo de 2019. El estadista debe gobernar en función de realidades, que en la actualidad son muy preocupantes. El Banco de España ha advertido que la rebaja del IRPF que beneficia a 3,1 millones de españoles exigirá aumentos de ingresos o disminuciones de gasto.

Los números de Pedro Sánchez

El nuevo Gobierno baraja una serie de medidas cuyo denominador común es reducir los ingresos y subir el gasto: recortar el IVA para ciertos productos, eliminar peajes de algunos tramos de autopista y crear rentas para ciertos colectivos.

Indudablemente todas estas decisiones son populares, y oponerse a ellas exige valentía. Pero desde 2016 el consumo interno se ha disparado, y los incrementos históricos de nuestras exportaciones ya no son posibles. Según el INE, las familias españolas necesitaron en 2017 financiación en términos netos por primera vez desde 2008.

El Banco de España confirma que sólo redujeron su deuda en 810 millones de euros frente a los 46.000 millones recortados en 2013. El año pasado los préstamos para el consumo crecieron un 15% en un contexto en el cual las rentas de las familias no cubren sus gastos e inversiones.

Unidos Podemos exige que prevalezcan los convenios sectoriales sobre los establecidos a nivel de empresa, circunstancia que eliminaría una flexibilidad que ha impulsado la contratación desde 2012.

El proteccionismo desatado por la administración Trump precipitará una desacceleración brusca de la economía internacional

También es previsible que los distintos partidos que convirtieron a Pedro Sánchez en presidente reclamen contrapartidas que conllevarán subidas adicionales del gasto.

Nos enfrentábamos, antes del cambio de Gobierno, a un final del ciclo de crecimiento sustentado en tipos de interés y precios energéticos muy reducidos. El proteccionismo desatado por la administración Trump precipitará una desacceleración brusca de la economía internacional. La obligación de nuestros gobernantes es reaccionar desde la responsabilidad, por impopular que sea.