África puede, nada es inevitable

El continente africano tiene un gran potencial de crecimiento, y dispone de una población joven que necesita empleos que puede generar la tecnología

Durante la última década, África reunió a seis de las diez economías con mayor crecimiento favorecidas por la exportación de materias primas que representa el 32% del PIB. El impulso del petróleo, y otros recursos, los préstamos baratos de China y Japón y las remesas de la diáspora, el comercio, la construcción o el flujo de capital han permitido que la mitad de los países africanos mejoren su calidad de gobierno, el clima de negocios, y los servicios básicos y esto se ha traducido en un aumento de los niveles de ingresos y la caída de la pobreza del 51% en 2005, al 40% en 2015.

Unos 350 millones de africanos ahora ganan entre 2 y 20 dólares al día. Pero la venta de los productos básicos es intensiva en capital, con poco impacto en el empleo local.

Unos 400 millones de personas aún viven por debajo del umbral de pobreza y 200 millones habitan en Estados frágiles o fallidos. El ingreso medio anual per cápita es de sólo 1.000 dólares, pero los patrones de crecimiento varían mucho entre diferentes Estados.

Cerca de 12 millones de jóvenes ingresan en el mundo laboral cada año, pero sólo una quinta parte consigue un empleo, Hoy, 8 de cada 10 africanos son trabajadores autónomos y pobres atrapados en el sector informal.

Entre 1980 y 2015, África perdió casi 1,5 billones de dólares por la fuga ilícita de capital o la corrupción. Esta cifra representa tres veces la ayuda internacional recibida en el mismo período y es mayor que la inversión extranjera.

La demografía, con 1.200 millones de habitantes, la mitad menores de 18 años, puede ser un dividendo o un desafío, dependiendo del acierto, En 2050, serán 2.000 millones, una persona de cada cinco en el mundo será africano, también uno de cada cuatro trabajadores.

La región es vulnerable. Tiene graves problemas, como la pobreza, la enfermedad, la mortalidad infantil, el cambio climático, la corrupción, los conflictos étnicos, algunas dictaduras corruptas. Y sin embargo, el desastre ya no es homogéneo y está siendo desafiado.

Con este panorama , Todos los días miles de jóvenes desesperados emigran y muchos de ellos se ahogan en el Mediterráneo o intentando saltar vallas como en Melilla tratando de llegar a Europa, Entonces, ¿por qué el crecimiento del empleo es tan bajo si las perspectivas económicas son buenos?

La fuga de capitales en el continente africano es mayor que la ayuda inernacional que recibe

El continente, en lugar de centrarse en las cuestiones de la identidad, tras la etapa colonialista y la era de los libertadores, ahora toca impulsar el crecimiento, concentrarse en el desarrollo y asumir su responsabilidad por el destino económico. Proporcionar las condiciones para crear empleo es urgente.

África necesita integración, sigue sufriendo discriminación en su propio continente. También inversión en Agricultura, Industria, infraestructuras, tecnología y educación para impulsar la creación de los puestos de trabajo necesarios.

África es rica, con el 30% de los recursos naturales y 60% de la tierra cultivable del mundo. Sin embargo, la mayoría de los agricultores son pobres. Pero el continente importa anualmente por valor 35 mil millones de dólares productos alimentarios.

África podría ser el granero del mundo y satisfacer las necesidades alimentarias de 9 mil millones de personas en 2050, pero debe liberar todo su potencial y hacer una transformación radical de su agricultura. Los agricultores y el sector agroalimentario podría generar un mercado de un billón de dólares en 2030, y millones de puestos de trabajo si pudieran tener acceso a fondos, electricidad, regadío y mejor tecnología .

El continente tiene que apostar por la industrialización que es un requisito previo para la transformación económica. La industria representa el 10% del PIB , mientras la agricultura el 12%, pero emplea el 60%. Esto demuestra que la riqueza de África no es está donde está la gente. Esta es la paradoja del crecimiento con un mercado laboral débil.

Con las nuevas tecnologías, África puede crecer salvando las etapas previas que protagonizó Occidente

No hay industrialización, ni siquiera en la producción agrícola. Como en Asia empieza a ser más caro fabricar productos. debido al aumento de costos de mano de obra, se genera oportunidades sin precedentes para África. Puede ofrecer su mano de obra intensiva y así ayudar a resolver el problema persistente de desempleo. Abordar este tema complejo, es un imperativo puesto que las verdaderas causas son estructurales.

La región también tiene otra gran ventaja: puede dar un salto tecnológico evitando muchas etapas que los países desarrollados tuvieron que hacer. Casi 800 millones de teléfonos móviles circulan en el continente, e Internet puede originar menores costes. Si hay una cosa en la que los expertos están de acuerdo es que África presentará una de las mayores oportunidades de crecimiento en el mundo en los próximos años.

África puede, como lo hicieron otras regiones, En el desarrollo nada es inevitable, pero debe tener una visión clara de cómo crecer, y cómo se utiliza el crecimiento en beneficio de sus poblaciones. No se trata de crecer para el beneficio de una pequeña elite. La cuestion central es resolver las contradicciones, apostando por más justicia, y más dignidad y mejora de la calidad de vida para los pueblos africanos, principalmente para sus jóvenes, que son los pilares de su presente y futuro.