¿Por qué las empresas no vuelven a Cataluña aunque Illa lo desea? 

El líder del PSC afirma que los motivos de la huida de las empresas de Cataluña tras el referéndum de 2017 fueron de seguridad jurídica y no fiscales

Esta semana Economía Digital público una magnífica entrevista con Salvador Illa, líder del PSC en Cataluña. La pieza nos deja muchos elementos de reflexión y sobre todo nos permite llegar a la conclusión de que en política es posible hacer una cosa y afirmar la contraria, hecho que no sucede en ninguna otra disciplina profesional: un vendedor de coches no dice vender neveras y un vendedor de televisores no está en mitad de un mercado gritando sobre ofertas de camisetas. En política uno puede hacer como Illa, presentarse como alternativa al independentismo y en realidad ser muleta de un gobierno separatista.  

De la entrevista de Illa llama la atención que destila una serie de críticas a Aragonès, Presidente de la Generalitat de Catalunya, a la vez que una adaptación de su discurso a un mundo irreal.  

Según Illa quien es, a la vez, líder de la oposición y principal aliado del independentista, Pere Aragonès, en Cataluña todos los niños aprenden perfectamente catalán en las escuelas, cosa que no parece compartir el comisario europeo Reynders, los tribunales de justicia ni los propios aliados separatistas de Aragonés que afirman, sin ruborizarse, que su objetivo es que el catalán sea lengua única en Cataluña y acaban de aprobar una ley, con la colaboración de Illa, que va en la línea de conseguir ese objetivo.  

El secretario general del PSC y principal líder de la oposición en Cataluña, Salvador Illa.

En realidad, releyendo la entrevista, la principal crítica que Illa realiza a Aragonés no tiene que ver con su programa ni su ideario, dado que comparten objetivos como la mesa de negociación, materia lingüística y ámbito fiscal. Lo que Illa reprocha a Aragonés es que el elegido como socio prioritario del gobierno catalán no sea él mismo y su PSC, sino los Comunes, la CUP o Junts. Illa solo lamenta de Aragonés que el PSC sea plato de segunda mesa, pero acepta la humillación a cambio de que Pedro Sánchez se mantenga en la presidencia del Gobierno.   

El PSC se ha olvidado que gano las elecciones autonómicas en Cataluña y, de forma incomprensible, si no fuera porque a cambio mantiene Moncloa, en lugar de combatir a Aragonés y a ERC implora y suplica, que le dejen aprobar los presupuestos.  

En los años 80 del siglo XX el Partido Socialista Vasco, con Txiqui Benegas hizo algo parecido, ganó unas elecciones, pero le entrego la presidencia del gobierno vasco al PNV. Obviamente, jamás volvió a ganar unas elecciones. Si a la gente le dices “aunque me votes a mí yo haré que gobierne el que tú no has votado les da por no votarte nunca más”

Illa reclama que vuelvan las empresas

Uno de los titulares de la entrevista es la proclama de Illa de que desea que vuelvan a Cataluña las empresas que su fueron en 2017 por culpa del referéndum y la declaración de independencia. El líder del PSC afirma que los motivos de la huida fueron de seguridad jurídica y no fiscales.

Que vuelvan las empresas es deseable, vital, para que Cataluña, como dice su himno “torni a ser rica i plena”

Es importante que Illa revise sus fuentes de información: si bien en otoño de 2017, efectivamente, quedarse fuera de la zona Euro fue el principal motivo de la salida en estampida de miles de empresas, tras ese boom el goteo de fugas empresariales ha seguido hasta día de hoy y tiene que ver con trabas administrativas y con una fiscalidad insoportable tal como un estudio de la Cámara de Comercio de Lleida, PIMEC y la Universidad Pompeu Fabra han acreditado sobre los motivos del traslado de empresas de Lleida a Huesca.  

Para que las empresas vuelvan a Cataluña hay que bajar impuestos, crear una administración eficaz, ágil y competente, terminar con los mensajes de “ho tornarem a fer” (Lo volveremos a hacer) o que crean contextos que facilitan “tornar-ho a fer” (volverlo a hacer) como son rebajar el delito de sedición, que viene a ser una invitación a delinquir gratis.  

Que vuelvan las empresas es deseable, vital, para que Cataluña, como dice su himno “torni a ser rica i plena” (vuelva a ser rica y llena), pero para que eso suceda el primer paso es que Cataluña cuente con un gobierno y un partido socialista que hagan simple y llanamente justo lo contrario en materia, regulatoria, jurídica y fiscal de la que vienen haciendo desde 2012.