Magneti Marelli se recupera, tras perder 70 millones

Las actividades de Magneti Marelli España en los dos últimos lustros se caracterizan por una sucesión inacabable de números rojos, que se han orillado a golpe de expedientes de regulación de empleo para varios centenares de trabajadores.

La firma, subsidiaria de Fiat, produce componentes de automóviles. Sus cuentas comenzaron a arrojar déficit en 2003. Desde entonces acumulan un quebranto total de 70 millones de euros. De ellos, 41 millones todavía se arrastran en el balance, pendientes de compensación.

El año pasado, empero, la situación mejoró de forma notable. En vez de ajustes de plantilla, la compañía creó una quincena de puestos de trabajo, gracias a unas inversiones en bienes de equipo de 10 millones. La racha prosigue en el presente ejercicio, con nuevas inversiones y más generación de empleo.

En 2013, el resultado de explotación cambió de signo y entró en terreno positivo, con un superávit de 4,3 millones. Pero la carga financiera que soporta el balance, motivó que una vez más se rubricara el año con números rojos, si bien reducidos a 0,7 millones, frente a los 4,6 millones, también negativos, de 2012.

El flujo de caja fue ampliamente positivo, por importe superior a los 10 millones. Sin duda, contribuyó a la mejora el fuerte impulso de las ventas, que subieron de 209 a 242 millones, las más elevadas de los últimos tiempos. La exportación representó la mitad de los ingresos.

Magneti Marelli tiene 900 empleados. Cuenta con tres fábricas en Catalunya, sitas en Llinars del Vallès, donde radica la sede social, Barberà del Vallès y Santpedor. En ellas produce tubos de escape, luces y otros componentes para automoción.