La sicav de los dueños de Almirall eleva su patrimonio hasta los 374 millones
La sociedad de inversión de Antonio y Jorge Gallardo Ballart crece a un ritmo endiablado. Al cierre del primer semestre de este año ha alcanzado unos recursos de 374 millones de euros. En 2011 contaba con 231 millones, que el año siguiente subieron a 273 millones y al concluir 2013 superaban los 315 millones.
Los rendimientos han sido dispares, pero en conjunto suponen una rentabilidad apreciable. En 2011 fue negativa, con un retroceso del 3,98%. Pero a partir de entonces el signo cambió y logró encadenar fuertes alzas: 11,18% en 2012 y 8,78% en 2013. Entre enero y junio, el incremento mantiene un buen ritmo y roza el 5%.
La gestión de la entidad está encomendada a Banco Santander. De todos los fondos administrados, las inversiones en activos nacionales se limitan a 19 millones; el resto, salvo un pequeño saldo que se mantiene en liquidez, está colocado en fondos de inversión extranjeros gestionados por Pimco, Fidelity, Aberdeen, Bluebay, Franklin Templeton y Vanguard. También incluye posiciones en Kalmar, Carmignac, Schroder, IVA Global, Sky Harbor, Dimensional, Henderson, Matthews y JO Hambro.
Los más voluminosos son el titulado Global Bond Fund I, de Pimco, y el Global Bond I, de Templeton, con 43,5 y 38,7 millones, respectivamente. En orden descendente siguen Vanguard US Futures Fund e IVA Global I, con 34 y 33 millones.
Antonio y Jorge Gallardo dividieron hace tiempo sus tareas profesionales. El primero administra los caudales familiares, mientras que el segundo se dedica a dirigir el laboratorio Almirall, cuyas acciones cotizan en bolsa. El 63% de esta sociedad, que controlan a medias, tiene un valor de 1.260 millones. A raíz de la salida de Almirall a bolsa en 2007, ingresaron en su peculio privado más de 800 millones contantes y sonantes.