La fiesta de la ‘creativación’

He asistido al Foro Impulsa en Girona detrás del cual está el infatigable y optimista empresario Josep Lagares, inventor del concepto creativación (creatividad e innovación). Un millar y medio de personas, la mayoría jóvenes, asistieron a unas jornadas donde se pudo conocer las experiencias de varios gurús del mundo de la innovación y una treintena de start ups expusieron sus primeros pasos.

Si tuviera que resumir los principales conceptos que se cernían sobre la jornada, diría que son la necesidad de las innovaciones con finalidad social y la necesidad de innovaciones disruptivas. La mayoría de ponentes, incluso algún representante de alguna multinacional, insistieron en que el motor de la emprendeduría debía ser la vocación para mejorar las condiciones de vida de forma sostenible. Que la finalidad de los nuevos emprendedores no debe poner en primer lugar el dinero o incluso el número de puestos de trabajo, sino la creación de un nuevo servicio o producto que resuelva problemas sociales amplios y lo haga sin creárselos a otra gente o al planeta, que somos todos.

El otro gran principio que se repite es una obviedad: el principal enemigo del cambio es la rutina y la actitud conservadora. La innovación evolutiva no es garantía suficiente para los grandes cambios que necesita la humanidad. Se necesitan innovaciones disruptivas para provocar saltos adelante. Tuvimos ocasión de escuchar a varios representantes de esta manera de hacer.

Lyn Heward, directora de creación del Cirque du Soleil, nos habló de los nuevos portales de la creatividad. Con una experiencia rupturista en el género del circo, que ha permitido fundar una auténtica multinacional con más de 5.000 personas, hizo un llamamiento a descubrir el poder de la creatividad y la imaginación cuando la aplicamos a nuestras propias vidas.

Christer Windeløv-Lidzélius, director de KaosPilot, representa un modelo educativo disruptivo dedicado a la formación de emprendedores creativos y a la innovación social. La escuela danesa forma gente con responsabilidad social y agentes de cambio de cara a modular una sociedad futura más justa. Y siempre transformando las dificultades en retos y éstos en oportunidades.

David Heinemeier es el danés fundador de Rubyon Ralls, web de código abierto utilizado en todo el mundo. Su libro, Rework, se ha convertido bestseller por explicar cómo gestionar empresas de manera diferente.

Yendo Agarwal, de India y presidente de EDX, ha cambiado la educación con cursos libres y gratuitos por Internet. El papel de la cooperación entre estudiantes on line sustituye las horas innecesarias de profesor y permite acceder a clases magistrales de los mejores profesores del mundo.

Jonathan Ortmans, de Gran Bretaña, presidente de Global Entrepreneurship Week, pone en contacto mentores y emprendedores jóvenes con el objetivo de promover nuevas generaciones de agentes de cambio social en todo el mundo.

El mexicano Fernando Fabre, de Endeavor Global, cataliza el crecimiento económico a largo plazo mediante la selección, mentorización y aceleración de los mejores emprendedores de alto impacto en el mundo. Mostró como estos emprendedores de alto impacto tienen una capacidad de replicar y multiplicar iniciativas que se expanden de forma concéntrica.

Junto a los gurús internacionales, el Foro Impulsa incluyó la presencia de representantes autóctonos de Wayra, la aceleradora de Telefónica, de la Fundación para la Creativación, de portales de mecenazgo como Verkami o Worldcoo. Y culminó con tres talleres sobre Recursos para emprender con Alfons Cornell, Generar un modelo de negocio con Verònica Torras, y Generar una idea ganadora con Xavier Verdaguer.

El Fórum Impulsa en un contexto de grisura y pesimismo fue un oasis por unas cuantas horas donde las ideas de cambio y responsabilidad social fueron dominantes. Dicho esto, cuesta entender cómo en estos actos, presididos normalmente por las autoridades de turno, éstas no nos expliquen cómo se aplican la lección e impulsan cambios con finalidad social y cambios disruptivos, superando las resistencias corporativas de oligopolios, funcionarios o políticos.

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