Junqueras, ¡show me the money!
Pese a que me he hecho el firme propósito de ser una voz discrepante en el diario Economía Digital sobre el proceso soberanista catalán (no hablo), me ha parecido que hoy podía aportar algo de luz sobre este tema. Eso sí, desde una perspectiva económica.
Estos últimos seis años, mis clases de macroeconomía han dado para mucho. Cada semana, a veces cada día, los titulares de los telediarios y de la prensa escrita eran temas de mi asignatura: prima de riesgo, rescates bancarios, déficit público, tipos de interés, banco central europeo, austeridad, etc…E incluso, el tema de la independencia tiene que ver con el PIB que generamos, el déficit público que heredaría Cataluña, etc …
La principal diferencia que plantea Oriol Junqueras es que se desobedezca la prohibición de España y que se saque adelante una consulta que termine conduciendo a una declaración del parlamento: una DUI (Declaración Unilateral de Independencia). Mientras que Artur Mas no quiere incumplir ninguna ley para no poner en bandeja al gobierno español la excusa de la legalidad de tumbar el proceso.
La diferencia entre un planteamiento y el otro es que hace falta dinero, y no lo tenemos. Según mis cálculos, la cifra que sería necesaria para sacar adelante una DUI serían unos 50.000 millones de euros.
La gente de este país necesita comer cada día. Es una mala costumbre que tenemos, ¡mira! De hecho comemos varias veces al día, y eso no sale del aire. Sale de sus bolsillos. Para sacar adelante Cataluña en una situación extrema no hace falta disponer del PIB entero del país (unos 200.000 millones de euros) pero si al menos del presupuesto durante un tiempo considerable (un año) de los principales organismos públicos (Generalitat, diputaciones, ayuntamientos, universidades , etc …).
Si el presupuesto de la Generalitat es de unos 20.000 millones de euros anuales, y le sumamos el de los 950 ayuntamientos, las cuatro diputaciones, siete universidades, 41 consejos comarcales, las empresas que tienen concesiones, 240.000 funcionarios, etc … Nos podríamos ir a una cifra que estaría alrededor del 25% del PIB catalán. Este dinero difícilmente se podría movilizar de forma particular y sin levantar ninguna sospecha. Es necesario que alguien de los que manda en el mundo dé el visto bueno.
Pensar que el Parlamento hará la DUI y el gobierno de Madrid seguirá pagando los traspasos para pagar las nóminas es de un naif espectacular. Pero creer que enseguida que hagan la DUI se hará público una cuenta corriente para que los ciudadanos ingresen sus impuestos, y de allí paguemos las nóminas, es fruto de la inconsciencia y el desconocimiento de los entresijos de una administración tributaria del siglo XXI.
Si no le tiras monedas, el muñeco no se mueve. Y aunque una gran cantidad de personas esté de acuerdo con querer la independencia, la gente, como he dicho, tiene el pequeño vicio de comer cada día. Y mientras el Sr. Junqueras no tenga mínimamente apalabrado quién nos hará el préstamo de ese dinero, ya puede ir haciendo declaraciones y avanzando elecciones, que el camino será como el palo de un gallinero: corto y lleno de impedimentos.