Galletas Birba cambia otra vez de manos
Galetes Camprodon, fabricante de las galletas Birba, tiene nuevos dueños. Un grupo de inversores, liderado por Víctor Marsal Colom, se ha hecho con la propiedad de la emblemática firma gerundense y, mediante una ampliación de capital, le ha inyectado 750.000 euros, a fin de recomponer su debilitado patrimonio. Previamente, Birba recortó el capital de 3,9 millones a cero.
Birba se fundó en 1910. Elabora un producto de gran prestigio en el mercado, pero sufre problemas crónicos de rentabilidad, que han provocado sucesivos cambios en su accionariado.
A mediados del pasado decenio, la histórica entidad pasó a manos de la familia Nadal Lozano. Los vendedores fueron a la sazón varios hombres de negocios de Barcelona, entre ellos Santiago Mercadé Vila, de la promotora Layetana; Javier Suqué Mateu, de Casinos de Catalunya; y Joaquim Boixareu Antolí, titular de compañías siderúrgicas y socio de la extinta Spanair.
En manos de los Nadal, Birba fortaleció notablemente su actividad, pero siguió cosechando números rojos, hasta que hace un par de meses los titulares de la centenaria empresa decidieron traspasarla al grupo de Víctor Marsal. En 2012, último balance conocido, Birba facturó 5,5 millones y contabilizó una pérdida neta de 440.000 euros.