Galicia vs Euskadi
Permítanme unir dos circunstancias de las últimas semanas: por una parte, las declaraciones del presidente español en Soutomaior poniendo la economía gallega como ejemplo; por la otra, la inesperada crisis de Fagor que sirve para cuestionar el grupo Mondragón, buque insignia de la economía vasca. A la vista de ambos factores, alguien podría sentirse tentado a extraer conclusiones precipitadas.
Galicia y Euskadi presentan similitudes evidentes que permiten su comparación: los dos territorios pertenecientes al Estado Español, los dos en la cornisa cantábrica, peso tradicional del campo y la pesca, tamaño similar y reconversiones industriales en ambas economías cuando la entrada en la CEE.
Lo primero que llama la atención es que a pesar de que Galicia presenta un 27% de población más que Euskadi, el PIB vasco es un 16% superior al gallego, lo que implica que el PIB per cápita es un 49% mayor. Analizando los mercados de destino de la producción, se observa que mientras que el consumo interior es similar, la producción de Euskadi consigue un 20% de mayor penetración en los mercados internacionales y, sobre todo, un 70% más en el mercado español (24.551 millones € vs 14.451 millones € ).
En Euskadi el paro es del 15% frente al 21% de Galicia, aunque Galicia presenta una tasa de ocupación inferior a la del País Vasco, 55% contra 57%. Ítem más: los gallegos emigramos en una proporción superior a la de los vascos, lo que en buena lógica habría aliviado nuestras cifras de desempleo. Mientras que la emigración interior muestra números proporcionales en las dos Comunidades Autónomas, las diferencias se disparan cuando miramos la emigración exterior. Así, en 2011, según el INE, 5.285 personas con nacionalidad española marcharon de Galicia hacia el extranjero, un fenómeno que se dio nada más que 2.282 veces en el País Vasco.
Atendiendo a la estructura empresarial, detectamos otros elementos dignos de destacar. Así, un tercio de las 25 compañías españolas más innovadoras son vascas. En el top 1000 de empresas europeas por volumen inversor en I D, figuran cinco empresas vascas; gallegas, sólo una, Pescanova. Se conoce el efecto de la dimensión empresarial sobre la productividad media de una economía. Y ¿cuántas empresas gallegas tienen más de 250 trabajadores? Nueve. ¿Cuántas hay en el País Vasco? Veinticuatro.
Destacable resulta la capacidad del modelo económico vasco para retener sus principales referencias, como puede ser el caso de Iberdrola, otro factor clave del desarrollo. Por otro lado, el sector forestal vasco se desarrolla sin sufrir la plaga del eucalipto; la industria recibe energía sin la necesidad de llenar los ríos de minicentrales; el esfuerzo urbanístico en torno al Guggenheim parte de un concepto y un objetivo de rendimiento evidente; la cultura vasca recibe el apoyo institucional y social convirtiéndose en un factor de diferenciación de su oferta, etc.
En resumen: a pesar del golpe que implica la crisis de Fagor, acaso Rajoy deba variar sus referentes o simplemente callar antes de emitir juicios tan políticamente interesados.