Ficosa amplía su red de fábricas en China

El grupo catalán Ficosa International, fabricante de componentes para automoción, intensifica su presencia en China. El pasado año levantó allí una gran factoría de 31.000 metros cuadrados, tras alcanzar la otra planta que tiene en el país su capacidad máxima en el plazo récord de tres años.

Paralelamente, instaló una planta satélite de bajo coste para complementar las actividades productivas de sus clientes en ese país. No se detiene aquí la actividad industrial, porque ya tiene planes para poner en servicio otros tres centros del mismo género que complementen los de sus clientes. El mercado automovilístico chino ya es mayor que el europeo y sigue registrando índices de crecimiento vertiginosos.

Ficosa emplea a 7.850 personas y viene sufriendo en los últimos meses fuertes tensiones de tesorería en España, que le han impedido incluso atender el pago de algunas nóminas. Posee filiales en una quincena de países y vende en el exterior el 95% de la producción. Manufactura sistemas de visión y de mando y control, así como lavafaros y depósitos.

En 2012, la facturación consolidada pasó de 972 a 952 millones. En estos guarismos se incluye la venta temporal de medio millón de televisores, como parte del acuerdo suscrito con Sony, por el cual Ficosa se hizo con la fábrica que la compañía nipona posee en Viladecavalls.

Excluidas estás ventas atípicas, la cifra de negocio de Ficosa subió de 857 a 879 millones. Pese al alza, los resultados no acompañaron. El beneficio consolidado se desplomó de 44,6 a 1,6 millones, con un flujo de caja positivo de 40 millones.

José María Pujol Artigas, presidente del grupo, atribuye el retroceso a varios factores. De un lado, la negativa evolución de los mercados europeos meridionales, en particular Italia, Francia y España. De otro, problemas operativos y comerciales en las factorías de Estados Unidos. Por último, al aumento de los costes en sus subsidiarias brasileñas.