Evolución, sin parar
Economía Digital evoluciona, sin parar. Hoy introducimos el concepto de la jerarquización social y presentamos la nueva imagen global. Incluye la modernización de la marca y el lanzamiento del diseño del portal. No es un mero «cambio de piel» –citamos a Pedro J. Ramírez—, sino el reflejo de la transformación interior que madura desde hace meses en nuestras redacciones (Barcelona, Madrid y A Coruña) para contar historias a cuántos más lectores, mejor. Nos desarrollamos para que ocupen el centro de la organización.
Preservamos el ADN original, como hemos demostrado con perseverancia. Retenemos el gusto por las noticias inéditas, exactas y bien explicadas. Las que nos hacen cada día más influyentes. El nuevo emblema, de hecho, reivindica esa raíz y realidad. A pesar de ello, confirmamos lo que usuarios, clientes y otros grupos de interés comentan: Economía Digital no es la misma.
Retorcemos el paralelismo de «la piel» planteado por Ramírez. El proyecto tiene esqueleto, músculos y sensibilidades distintas. Hoy es el día en que lo proclamamos sin tapujos. Y somos diferentes, esencialmente, porque buena parte del equipo se ha sumado durante 2015. Su llegada ayuda a cerrar ciclos. Estamos contentos, estimulados, orgullosos… con ganas de más. No sólo por haber amasado como grupo el millón de lectores diferentes, según comScore. También porque lo que veis en pantalla no es el final de ningún proyecto: es el inicio.
Nos proponemos estar siempre a la cabeza de la innovación, así que durante 2016 asistiremos a la transformación de nuestros productos. Seremos más osados. En Economía Digital, por ahora, hemos dado prioridad a reforzar los valores –antiguos y nuevos—, facilitar la lectura y la adaptabilidad móvil. Nos convenció como estas mismas necesidades quedaban perfectamente superadas en los cambios de Clarín, CNN Expansión, El Financiero de México y otras grandes publicaciones mundiales.
La Economía Digital que hoy surge tiene los mismos responsables. Planteamos a R2 Media Factory nuestros problemas, ilusiones y metas. Nos propusieron soluciones ya testadas con éxito. Otras rompedoras, pero menos exploradas. Decidimos atrevernos con todas las ideas, aunque su despliegue se hará por fases. Prudentes y audaces. El nuevo diseño es, aunque estimulante, la menor de las claves. Nuestros lectores comparten el mando de la portada, la mejor tarjeta de presentación que podíamos lucir es la que dibuje nuestra comunidad.
Las noticias y las secciones (imprescindible, necesario y útil) se posicionan en importancia según el índice de lectura, viralidad y temporalidad. Tres factores combinados gracias a las matemáticas que retratan de manera fiel el interés de los lectores. Vosotros sois nuestros portadistas gracias al trabajo y empeño de nuestros compañeros del departamento de ingeniería (Xavier y Martín, chapeau).
Bienvenidos, pues, a la nueva Economía Digital. Un medio de comunicación imprescindible por los temas propios, necesario por la fiabilidad de sus periodistas y autores, y útil para los lectores por todo lo anterior. Son nuestros tres pilares. Nuestros tres compromisos. Trabajaremos, todavía más duro, para no defraudaros. Un millón de gracias…