El alma se serena
Con un Podemos inexistente en Galicia y un BNG calmo y sereno ocupando el terreno de la izquierda, la situación solo puede complicarse más para el PSdeG
Seguramente ya nadie lo recordará, pero cuando la televisión era en blanco y negro y solo había una cadena en España, la única TVE, al finalizar la emisión se dedicaba un tiempo a la meditación antes del encamamiento con el sugestivo título de El alma se serena. También era previo a la ejecución del himno nacional y la aparición de la efigie del Generalísimo, guardián de las esencias patrias, así como de nuestros sueños. Eran reflexiones sobre la vida soportadas en textos bíblicos; eran otros tiempos.
Caballero en el rugby
El rugby es ese deporte, nacido, cómo no, en Inglaterra y que se juega con un balón imposible. Imposible por impredecible en su trayectoria y que fue importado por los americanos del norte para fusionar dos deportes de origen común, el fútbol y el rugby, el llamado por nosotros fútbol americano.
Casi todo el mundo conoce aquel dicho británico que indica “que el fútbol es un juego de caballeros jugado por villanos y el rugby un juego de villanos jugado por caballeros”. Rugby y Fútbol siempre se han visto como antitéticos: fuerza contra habilidad, juego limpio frente juego desleal, la realidad enfrentada a la ficción. Las posiciones en el rugby dividen al equipo en dos grandes conjuntos: los delanteros y los zagueros. Resulta curioso que son más los delanteros (8) que los zagueros o defensores (7). En general, los zagueros son más ágiles y rápidos que los delanteros, justo al contrario que en el fútbol. Otra diferencia sustancial entre los dos tipos de juego es el denominado tackle o placaje en el rugby. El reglamento del rugby prohíbe explícitamente y sanciona con expulsión el tackle o contacto con la zona de la cabeza. A pesar de ser un juego con un gran contacto físico, está totalmente regulado, llegando incluso a prescribirse en la actualidad normas específicas para prevenir el contagio del virus de la Covid-19 o regular todavía más el tackle, introduciendo el tackle atolondrado o el tackle accidental.
El rugby es un juego muy rudo, casi tan rudo como la política
Saber a qué se juega
Se atribuye a Nelson Mandela la frase que iguala rugby y política: “el rugby es un juego muy rudo, casi tan rudo como la política”. Pero, a pesar de su rudeza, el rugby es un deporte sometido a reglas muy claras y que, incluso, cuenta con el denominado tercer tiempo, ese momento posterior de confraternización donde ambos equipos beben y comen juntos por invitación del equipo local. Existe un Documento del Juego, normas oficiales, donde se ensalzan las verdaderas cualidades del buen jugador de rugby: la honestidad, el respeto, la disciplina, la lealtad, el sacrificio, el altruismo y en especial el espíritu de equipo.
Se acaba de abrir o ya quizás ahondar una brecha más que previsible en el interior del PSdeG a tenor de los últimos resultados electorales. “Tarde piaron” los críticos, aunque con renovadas fuerzas ante el proceso de elección del secretario general que se anuncia para el próximo año. Todo ello observado por un responsable BNG que insta a los socialistas a ocuparse de los desastres que conlleva la pandemia más que enzarzarse en trifulcas internas, coincidiendo así con un PP gobernando en una actitud decididamente volcada a la resolución de las urgencias más inmediatas. Con un Podemos inexistente en Galicia y un BNG calmo y sereno ocupando el terreno de la izquierda institucional, la situación solo puede complicarse más para el PSdeG y no solo en lo local. Tal y como están las cosas, a ver si va a resultar que Galicia, por una vez, se va a adelantar al resto de España.
Aunque no son tiempos proclives a recordar nuestro pasado en blanco y negro, preciso es serenar el alma y, además, recordar a qué se está jugando. Por cierto, en la muy de moda Nueva Zelanda dirigida por su planetariamente encumbrada Jacinta Arden, el deporte nacional es… el rugby. Y se juega en verano.