Editorial
Estimados leEDores. Cuando a mediados de febrero la anterior edición de mEDium vio la luz, la pandemia era apenas un temor confuso, indefinido, sin límites imaginables, pero fácilmente asimilable desde nuestro optimismo pinkeriano, un daño colateral que superaríamos sin más en nuestra historia de imparable desarrollo y avances científicos y tecnológicos sin parangón en ningún otro momento de nuestra civilización.
Actualmente, nadie que no esté infectado por el virus de la irresponsabilidad y el populismo más barato puede estar tan seguro de esa perspectiva. La pandemia se ha instalado entre nosotros, de una punta a otra del planeta y, hoy por hoy -¡ojalá esta afirmación quede rápidamente desfasada!- sólo conocemos una manera efectiva de enfrentarnos a ella: el confinamiento, una actitud útil, necesaria, pero en flagrante contradicción con aquello que más nos define, que es la sociabilidad.
Lo que hace unos meses eran hojas de ruta más o menos contrastadas hacia cualquier objetivo público que nos propusiéramos, hoy, si somos sensatos, deberíamos ponerlas en inmediata cuarentena. Nuestros patrones de respuesta, nuestras certezas sobre la lógica evolución de los modelos sociales, económicos y políticos en que nos desenvolvemos han quedado asimismo contaminados por esta pandemia global ante cuyo desarrollo carecemos de un veredicto definitivo.
La pandemia lo está poniendo todo patas arriba. Liderazgos políticos firmemente asentados hace unos meses se tambalean hoy faltos de convicción ante sus atribulados seguidores. Propuestas económicas que habríamos aborrecido hasta hace bien poco parecen en estos momentos deseadas tablas de salvación que nadie se atreve a cuestionar. El mundo que veíamos como un continuum se repliega sobre viejas fronteras y prejuicios y no estamos seguros de si volveremos a desplazarnos con la libertad y despreocupación con que lo hacíamos hasta hace unos pocos meses. Ni siquiera nos enfrentamos a nuestras más privadas relaciones, con familia, amigos, etc… con la misma convicción y naturalidad innata con que solíamos hacerlo hasta ahora.
Por esta razón, si hace unos meses, mEDium #4 ponía el acento en lo que desde nuestro punto de vista constituía el desafío económico ineludible al que debía enfrentarse la nueva mayoría gubernamental de esta legislatura, hoy les ponemos en las manos este mEDium #5 con el ánimo de provocar una reflexión no ya sólo sobre los efectos que esta pandemia deja en un tejido económico extremadamente desequilibrado, y de la que saldrá previsiblemente peor y con nuevos trastornos añadidos, sino extendiendo esa atención a otras áreas de la actividad social cuyo comportamiento en el futuro es una incógnita.
Nos fijamos, pues, en esas llagas que la pandemia va a dejar, está dejando, en la política, donde los estados asumen poderes excepcionales que justifican en la lucha contra la enfermedad pero sin una fecha precisa de devolución, en el creciente intervencionismo gubernamental que refuerza viejas aspiraciones aislacionistas y en la metástasis populista que encuentra terreno abonado en el desconcierto de las población es; en la economía, donde las amenazas sobre el libre mercado se expanden con una desinhibición preocupante; en el proyecto europeo y la globalización, cada vez más cuestionados; en la tecnología, donde nuevos actores imponen reglas de juego al margen de consensos democráticos; en la información, donde poderes públicos y privados exhiben herramientas, que limitan extraordinariamente el poder de decisión de los ciudadanos; y, finalmente, en el terreno social, donde los efectos del confinamiento auguran nuevos comportamientos, hoy difíciles de anticipar.
Para poder presentarles este análisis de la forma más caleidoscópica posible, mEDium ha recurrido a quince firmas de primer nivel para que compartan con todos ustedes sus preocupaciones y sus propuestas, sus dudas y sus convicciones, su perspectiva acerca de las dimensiones de la pandemia y su prospectiva sobre el mundo que nos espera al final de esta pesadilla. Al fin y al cabo, éste es el papel que juega mEDium entre las diferentes cabeceras de Grupo ED: darle la vuelta a la actualidad, abrir un espacio donde puedan confluir puntos de vista distintos para hacernos las preguntas que el vértigo de la actualidad a menudo no permite.
Firmemente comprometidos con la necesidad y la urgencia de ese debate, el Grupo ED ha reforzado su área de ED Ideas, donde se enmarca mEDium. Si hace menos de tres años, llevamos a la imprenta un primer número con la intención de que fuera una publicación anual, este año vamos a sacar tres ediciones y en 2021 mEDium tendrá una periodicidad trimestral. A ello debemos añadir la web creada específicamente para esta cabecera: medium.economiadigital.es, con el objetivo de que ustedes puedan tener un acceso más a nuestros contenidos.
Disfruten con la lectura de este mEDium #5 y no duden en hacernos llegar todas las consideraciones que crean oportunas. El enriquecimiento de ese debate necesario que esta publicación persigue no debe acabarse en este cuadernillo o en las web del Grupo ED. Muchas gracias.