Economía de fin de año

Como cada fin de año, se ejecuta lo que queda de los presupuestos vigentes con el fin del ejercicio fiscal. Las empresas se apresuran a tomar las últimas decisiones para mostrar los resultados finalmente conseguidos en el actual contexto de crisis económica. Este año, aflora la justificación de reducción de ventas y contención del gasto para equilibrar los datos y también otros argumentos. Por ejemplo, en encuentros con alguna de las grandes empresas con los medios de comunicación de esta semana, se confirma que la especialización y la internacionalización son claves para la sostenibilidad en los próximos años.

Los consumidores también culminamos nuestras actividades, Haciendo vía para resolver lo que queda pendiente en nuestro entorno doméstico y familiar en el contexto de la crisis que nos ha ido disminuyendo el nivel de actividad.

También el sector financiero se apresuró a tomar decisiones: la noticia de la venta de 439 oficinas de La Caixa al multimillonario Carlos Slim por 428,2 millones, coincide con la del plan de apertura de otras 500 a lo largo de 2014 en México de Inbursa (que desde 2008 tiene como principal accionista a Caixabank). Las coincidencias a menudo no son casuales en la economía, pues son una forma de compensar las noticias desfavorables con otras positivas. Así se mantienen los niveles de confianza necesarios para que los valores de las empresas y sus activos puedan ir por el camino de la sostenibilidad que tienen marcado.

Los políticos también utilizan las coincidencias económicas: Rajoy dice que el Gobierno ha tomado la decisión de no pedir un rescate el mismo día (19 de diciembre) que el Ibex supera en algún momento los 8.300 puntos con un aumento de más del 1% que sitúa la revalorización de 2012 en una caída de 4,64%. Recordemos que el Ibex estaba a 8.723,8 puntos el 2 de enero de 2011 y que el registro más bajo del año se obtuvo el 24 de Julio, con 5.956,3 enteros. Para acabar de complicar la situación, los políticos catalanes pactan la aparición de nueve impuestos de nueva creación con una previsión de recaudación de 1.000 millones para el año próximo que aún están lejos de cubrir los 4.000 del recorte adicional previsto para 2013. El debate está servido cuando gran parte de esta nueva imposición se dirige a los grandes bancos y tanto Montoro como la AEB y la CECA se han apresurado a rechazar la medida sobre los depósitos.

Y también en el sector financiero, encontramos a CatalunyaCaixa que aprovecha la revalorización de las acciones de Gas Natural para obtener unas plusvalías de 4,5 millones en la venta de su participación del 1,49% por 182 millones. Todavía le queda resolver los títulos que tiene en propidedad de La Seda de Barcelona, ​​Applus y de Inmobiliaria Colonial antes de su venta anunciada por marzo de 2013 para seguir la pauta del FROB y las indicaciones de Bruselas. Banc Sabadell, mientras tanto, se queda con 462 oficinas de la antigua Caixa Penedès (ahora Banco Mare Nostrum) antes del traspaso de activos al Sareb.

Los consumidores asustados, afectados o rodeados de problemáticas sobre desahucios (dicen que 500 al día en España), de morosidades, de paro, de falta de pagas extras, etc. Dejamos de gastar con la alegría de otros años, pero compramos más por Internet y más influenciados por las redes sociales. Y las marcas de los fabricantes siguen resistiendo bien las embestidas de la marca de distribución incluso en alimentos, según un reciente informe de Deloitte sobre el consumo llamado Navidad Low Cost.

En resumen, una economía de fin de año carente de confianza y con un exceso de pesimismo general que, a nivel individual, se va resolviendo. Se debe trasladar las soluciones privadas e individuales a lo global consiguiendo, como dicen los recientes premios Nobel de economía Shapley y Rothque, la asignación estable de recursos.