Compromiso por la innovación
Estamos viendo que el sistema de innovación ha entrado en una fase en la que se está destruyendo lo que había hecho hasta ahora, con menos participación en los artículos científicos en revistas de prestigio, menos solicitudes de patentes europeas, etc… Se trata de otro problema de dinero a corto plazo para la inversión. En este caso, en temas de innovación, ¿o hay algo más?
Podríamos pensar que estamos innovando con la aplicación del conocimiento existente para solucionar problemas prácticos y desarrollar productos y procesos. Y de hecho, es cierto. Pero no basta: se necesita que haya colaboración estratégica para generar conocimiento de forma planificada. Urge un compromiso de gran alcance económico y social que asuma la responsabilidad del desarrollo de la innovación de forma organizada y planificada para afrontar y asegurarnos el futuro económico (y el trabajo de muchos investigadores).
El director general de la Fundación Cotec, Juan Mulet, que desde 1992 se dedica a promover la innovación tecnológica y a incrementar la sensibilidad social por la tecnología junto con el director general de la Fundación General CSIC, José Luis de Miguel , han dicho esta semana –durante la presentación del encuentro conjunta que se hará en Santander los días 5 y 6 de septiembre–, que hace falta urgentemente un compromiso público-privado en investigación.
Hay un claro retroceso en la inversión en investigación y desarrollo a partir de 2011. El gasto ejecutado en Investigación y Desarrollo (I D i) por parte del sector público esta cayendo al – 4,1% y el -2,4% por parte del sector privado. Teniendo en cuenta que el sistema de innovación pasó del 0,74% del PIB de 1995 al 1,39% en 2010 y que entre 2006 y 2010 se movilizaron 1.250 empresas y 1.580 grupos de investigación a través del programa CENIT que se terminó en 2010, el retroceso es muy importante.
Algunos (Xavier Ferràs) reclaman más interés por parte de las empresas de capital riesgo en la comunidad científica, orientando sus inversiones en proyectos que tengan impacto en el tejido industrial. Que generen las bases sólidas para el futuro más que la ganancia inmediata.
Si bien la Universidad se esfuerza en que la investigación siga empleando los medios que pueda disponer, que cada vez son más escasos, la innovación entendida como el cambio que cualquier tipo de conocimiento puede promover creando valor, pide un compromiso amplio, más allá de voluntarismos. Se pueden ver iniciativas importantes que apuntan en estas líneas como Lanzadera, que este año apadrina 15 proyectos con tres millones de euros y que en la primera convocatoria se han presentado 4.209 ideas.
Los proyectos premiados son de diferentes sectores de temas tan variados como la venta de moda a medida on line, la respuesta a tiempo real del nivel de satisfacción del cliente, los videojuegos sociales, investigación en odontología, servicios prestados por profesionales a particulares, varias webs colaborativas dirigidas a temas médicos, de consumo, didáctica, la creación de talleres o espectáculos científicos, arquitectura desmontable …
El compromiso involucra a todos los agentes económicos. Y las administraciones deben facilitar que se pueda dar la respuesta adecuada. Dejadme que reproduzca los títulos de los 10 retos de las estrategias de innovación que Cotec ha reunido en:
1.- Mejorar el sistema educativo
2.- Conseguir que la sociedad aprecie a los empresarios que asumen riesgos de innovación
3.- Evitar que las leyes la fiscalidad y la regulación obstaculicen la innovación
4.- Atraer el talento y la inversión extranjera
5.- Conseguir que la Universidad y la investigación pública se impliquen plenamente en la solución de los problemas de su entorno
6.- Hacer conscientes a las empresas que su sostenibilidad depende de su capacidad de crear valor
7.- Implicar a la financiación privada en la innovación
8.- Preparar las pymes para el mercado global
9.- Aprovechar el mercado de las grandes empresas y de la Administración como tractores tecnológicos
10.- Conseguir que las pymes encuentren una amplia oferta para la innovación.
¡Se nos gira el trabajo!