Bimbo lleva perdidos 124 millones en cinco años
José Manuel González Guzmán, vicepresidente y director general de Bimbo, anunció que la empresa inaugurará el año próximo una moderna planta industrial que está levantando en Azuqueca de Henares (Guadalajara). El coste previsto asciende a 70 millones de euros. Será la más rápida y eficiente de Europa, pese a contar con una sola línea de producción.
La red actual de Bimbo se compone de una decena de fábricas muy antiguas desperdigadas por la geografía nacional. Por este motivo, la alta dirección de la casa ha trazado un programa modernizador, que se prolongará hasta 2020.
La compañía, con sede central en Granollers, no es ajena a las vicisitudes generales que se vienen arrastrando desde que irrumpió la recesión: por un lado, la caída del consumo; por otro, la huida de los compradores hacia productos de marcas blancas.
Las ventas de Bimbo han experimentado sucesivos descensos en los últimos ejercicios, aunque en 2013 se recuperaron un 1% y alcanzaron los 264 millones de euros. Esta magnitud significa una mengua de 120 millones respecto de 2008. La cuenta de resultados está teñida de tinta roja desde 2009, cuando por vez primera en mucho tiempo afloró pérdidas, por valor de 10 millones.
En 2013, el déficit se fijó en 20,6 millones, cifra que implica un fuerte recorte de los 59,8 millones registrados el año precedente. El saldo negativo acumulado en el último quinquenio asciende a 124 millones. De dicha cantidad, 114 millones figuran todavía en el balance, pendientes de compensar.
El grupo mexicano Bimbo, accionista único de la casa, ha inyectado a su filial catalana 160 millones en los últimos tiempos, a fin de cubrir los quebrantos de su explotación y financiar las inversiones destinadas a renovar las instalaciones fabriles.