Trias y Collboni quieren un pacto en Barcelona
El republicano Alfred Bosch también muestra su voluntad de "sacar adelante la ciudad", tras comprobar que no puede transformar las municipales en un ensayo soberanista
Los candidatos a la alcaldía de Barcelona comienzan a centrar sus propuestas. Convencidos todos de que el nuevo mapa político exigirá acuerdos, el alcaldable de CiU, Xavier Trias, y el candidato del PSC, Jaume Collboni, han exhibido sus ganas de llegar a pactos que garanticen la gobernabilidad.
Collboni ha mostrado su deseo de un «gobierno municipal progresista», pero ha dejado claro que no mantendrá la ciudad paralizada, por una supuesta renuncia a determinados acuerdos políticos.
Trias ha reiterado lo que apunta desde hace varias semanas, y es que él ha podido acordar cuestiones, como alcalde, con una geometría variable, con el PP, y con el PSC, y colaborando, además, con la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH), que tuvo como portavoz a Ada Colau, la ahora candidata de Barcelona en Comú.
Un superávit poco justificado
Todos los candidatos por Barcelona han presentado sus propuestas en un debate en TV3, organizado también por Catalunya Ràdio. Una de las cuestiones que se ha dibujado es que los partidos de izquierda siguen acusando a Trias de no haber aprovechado lo suficiente el presupuesto municipal, con un superávit que no se puede justificar en una situación de crisis, según Collboni.
Los polos han comenzado a quedar claros. Ada Colau, que centraliza toda la campaña en estos momentos, se ha defendido de las acusaciones de Alberto Fernández, el candidato del PP, que le ha reprochado que critique la gestión del Ayuntamiento, cuando ha sido ICV, «que es usted», la que ha la protagonizado en los últimos años. Fernández ha insistido en que en Barcelona en Comú está integrada ICV, el talón de Aquiles en estos momentos de Colau.
Un acuerdo que necesitará tres patas
Por su parte, el candidato de Esquerra, Alfred Bosch, que coincide en medidas concretas con el PSC y con Barcelona en Comú, no acaba de situar la campaña donde le interesa. Esquerra quiere que las municipales se conviertan en una previa a las elecciones autonómicas del 27 de septiembre, en clave soberanista, pero no lo está consiguiendo.
Pese a ello, Bosch ha mostrado una gran complicidad con CiU, con la idea de llegar a un acuerdo de gobierno, «para sacar la ciudad adelante».
Ese pacto, sin embargo, será insuficiente, y necesitará una tercera pata, que podría ser el PSC.